Una publicación de Editorial Dleche ltda. 3.000 ejemplares. N° 80 - Febrero 2015 - Año 10 El Ocaso de la Vieja Agricultura Los desafíos del ganadero en el Siglo XXI Vaquillas a China El Análisis Fino Genética lechera y Pastoreo Mastitis El Agujero Negro contenidos _____________________________ 18 _____________________________ Director Rolando Carrillo Jerez, M.V., U. de Chile. Magister (c) Ciencias de la Comunicación, U. de La Frontera Director [ [email protected] Rolando Carrillo Jerez, M.V., ]U. de Chile. Magister (c) Ciencias de la Comunicación, U. de La Frontera Editor Periodístico [ [email protected] ] Danilo Phillipi Sánchez [ [email protected] ] Ser ganadero en el siglo XXI Cómo producir y no morir en el intento Editor Periodístico Directora de Arte & Diseño Danilo Phillipi Sánchez [ [email protected] ] Karina Morales Tello [ [email protected] ] Directora de Arte & Diseño DiseñoMorales portada:Tello [ [email protected] ] Karina La producción ganadera enfrenta grandes desafíos, derivados del cambio climático y de consideraciones ambientales y de bienestar animal que progresivamente impone el mercado. 6 14 SALUD MAMARIA Colaboraron en esta edición: Aspectos económicos de la mastitis Rodrigo Arias Enzo Capurro Einar Vargas Héctor Echeverría Eduardo Álvarez Alfredo Torres Iris Lobos Bioeconomía, la herramienta para cerrar el “agujero negro”. MANEJO ALIMENTARIO Temporada Estival Cómo enfrentar la alimentación del ganado en veranos con déficit hídrico. Ventas Santiago : Rolando Carrillo J. +569 97890996 Gloria Jara Muñoz +56993578375 Katherine Acevedo +56961984559 28 38 EXPORTACIÓN DE VAQUILLAS El Análisis Fino Reflexiones que ponderan la publicitada conveniencia del negocio. GENÉTICA Las opiniones emitidas por los articulistas, entrevistados y columnistas no representan necesariamente el pensamiento editorial. Se puede hacer uso de toda la información presente en cada edición, sin consultar al editor, siempre que se mencione la fuente. Los 3.000 ejemplares son distribuidos por gentileza de las ferias ganaderas y empresas auspiciadoras, desde Puerto Montt hasta la Región de Coquimbo, a productores, empresarios, plantas procesadoras, instituciones públicas y privadas vinculadas a la actividad, académicos y profesionales del rubro. La relación Genética / Pastoreo El éxito de cualquier sistema pastoril recae en factores genéticos. ® Es una Marca Registrada, editada y producida por Editorial Dleche Ltda. Prohibida su venta. Todos los derechos reservados. 62 GENÉTICA Cambio de la base genética Impresión: Gráfica Andes Ltda. Los alcances de la nueva base de comparación de toros Holstein. www.dleche.cl Santa Magdalena 75, of 609. Providencia. Santiago. (02) 2943 3210 / 9 - 978 90 96 EDITO R I A L Rolando Carrillo Jerez Director DLECHE E De innovadores, genios y comerciantes n una reunión con sus más cercanos, Steve Jobs decidió levantarle a Pepsi al hombre que había sabido derrotar a su gran competidora, John Sculley, experto en marketing. ¿Quieres seguir vendiendo agua con azúcar el resto de tu vida o venirte conmigo y cambiar el mundo?, le preguntó el creador del iPhone. Cuántos millones de dólares le puso Steve a John sobre la mesa, es un gran secreto, pero Sculley aceptó el desafío y se fue a trabajar con los muchachos de Apple. Este escenario de intelectos y de experiencias me parece de sumo interés analizar, por cuanto vender “agua con azúcar”, como dijera Jobs despectivamente, no es nada fácil. Si observamos la permanente innovación que hacen las compañías de gaseosas, podemos ver que sus equipos de marketing están aportando permanentemente nuevas ideas y variantes sobre el mismo producto, que tan buen maridaje hace con los destilados del Vale del Elqui. Por otro lado, el desafío de Steve Jobs en sus inicios era descomunal, tenía que competir nada más y nada menos que con una de las trasnacionales más poderosas del mundo, IBM. Todos sabemos que Jobs logró levantar su imperio con disciplina, innovación, trabajo en equipo y con más de algún golpe de suerte. No obstante, la gran enseñanza que al menos yo quisiera rescatar, es la capacidad que tuvo en darle valor a sus productos. De la boca de Jobs nunca se podría haber escuchado “es lo mismo, pero más barato”, planteamiento que sin embargo es aceptado por la gran mayoría del universo comercial. Porque es algo básico, representa el mínimo esfuerzo. Lo contrario es decir, “esto no es lo mismo, tiene más y mejores cualidades, y por eso vale más. Rebatiendo a Jobs, es fantástica la creatividad que han tenido los cerebros que venden “agua con azúcar”. Claramente 4 d l e c h e . 2 0 1 5 el producto se aprecia cuando está frío, tomarse una bebida cola tibia es como hacer gárgaras con harina. Entonces la industria desarrolla una inmensa industria del frío, con la marca destacada por todas partes. Los envases de diversos tamaños se adaptan al consumidor y a la hora y lugar del consumo. La botella cola de bar, es más pequeña que la de restorán. Así, la industria de la gaseosa se asocia al mundo etílico, obligando al cliente a pedir otra “corrida” para apagar la sed, que dicho sea de paso, nunca se apaga. Se apaga el cerebro, pero no la sed. Es cierto, hoy Chile no tiene ninguna posibilidad de vender un producto como los de Jobs. Esa motivación Vender un atributo, la cualidad de un producto, sí que es un tema complejo, y para eso debemos prepararnos. y capacidad las perdimos hace un siglo. El proyecto industrial que alguna vez tuvimos fue desechado, y adoptamos un perfil meramente comercial, donde la esencia es el margen, el diferencial entre el costo y el precio de venta. Es el mínimo esfuerzo, un ejercicio que en la historia de la Humanidad es apenas posterior al trueque y para el cual no se requieren grandes talentos ni habilidades, basta el sentido común. Pero vender un atributo, la cualidad de un producto, sí que es un tema complejo, y para eso debemos prepararnos. Un copihue no es un iPhone, pero es mucho más que una flor. SALUD MAMARIA Por Enzo Capurro, PhD. Universidad Austral de Chile Swedish University of Agricultural Sciences Uppsala, Sweden E Aspectos económicos de la mastitis Una perspectiva crítica a la falta de precisión Parte III. Bioeconomía, la herramienta para cerrar el “agujero negro” 6 d l e c h e . 2 0 1 5 n la edición N°78 (diciembre 2014), revisamos lo investigado en relación a que “las motivaciones económicas no siempre impulsan cambios conductuales en el terreno de la mastitis”. Allí analizamos dos de cuatro razones esgrimidas por diferentes autores. La primera razón es que “ganaderos/influenciadores” no querrán minimizar las pérdidas evitables debido a mastitis, porque ellos tienen otras metas diferentes que solo maximizar la rentabilidad, tales como sofisticar el trabajo (adquisición de tecnología/conocimiento) o incrementar el tamaño del rebaño. La segunda razón que vimos es que el manejo óptimo económico de la mastitis compite por los recursos que dispone el rebaño lechero. La lógica de decisiones financieras es la designación adecuada de los recursos escasos. Los recursos no solo deben ser usados en la prevención de mastitis, sino también en otras áreas de manejo dentro de la unidad lechera. Ahora revisaremos la tercera razón que se esgrime en la literatura internacional. Ésta dice relación con el riesgo inherente que está anclado a la decisión que se toma. Para la mayoría de las medidas preventivas, el gasto adicional es claro y no necesita mayor discusión. La estimación esperada de una baja en las pérdidas debido a mastitis es, sin embargo, un punto que necesita un análisis económico más acucioso apoyado por una “estrategia bioeconómica” que permita evaluar económicamente el impacto epidemiológico de una intervención (tratamientos de lactancia, de secado, extendidos, uso de guantes, toallas desechables v/s lavables, corte de cola, desinfectantes antes/después de la ordeña, ordeñar al final vacas con mastitis clínica y/o subclínica, etc.). Con una estrategia bioeconómica se pueden estimar los costos evitables cuando se planea la implementación de medidas preventivas adicionales, ya que, se sabe, existe una gran variación en pérdidas debido a mastitis para las diferentes explotaciones lecheras, y los productores generalmente subestiman estas pérdidas (Hogeveen et al., 2013). La cuarta razón por la que un “ganadero/influenciador” no seguiría las recomendaciones de un asesor, podría ser el comportamiento económico del ganadero. Incluso cuando la conducta del ganadero es “maximizar la rentabilidad”, su decisión final puede diferir de la lógica económica (Rabin 1998). Los estudios realizados han mostrado claramente que los ganaderos son más adversos a las pérdidas que a las ganancias (Jakobsen 2011), es decir, le temen más a las pérdidas que a las ganancias de incorporar o no una intervención en su flujo productivo, según este autor. Los costos económicos de mastitis, así como otros costos por enfermedades, consisten en pérdidas, como menor producción de leche por vaca/año o retiro de leche por periodos de carencia durante tratamientos (ver números anteriores de DLeche donde se muestra el cálculo del impacto) y eliminación prematura por mastitis, entre otros, y gastos, como uso adicional de antibióticos, desinfectante de pezones, etc. (McInerney et al., 1992). Los gastos en medidas preventivas pueden ser vistos como ingresos adicionales por su impacto en reducir pérdidas debido a mastitis (Hogeveen et al., 2011). Es importante modelar la efectividad de costos de las medidas preventivas desde una perspectiva no solo epidemiológica, sino también bioeconómica. La Bioeconomía ha demostrado que las intervenciones contra mastitis que pueden ser epidemiológicamente positivas no siempre son económicamente rentables. Con la Bioeconomía es posible valorar las intervenciones y medir su rentabilidad “epidemiológica”, la cual a su vez es predio-dependiente. Las pérdidas por mastitis, solo por concepto de leche, pueden llegar a 1.181 kg/lactación. Finalmente, una quinta razón por la cual “ganaderos/ influenciadores” no siguen las recomendaciones de un asesor, podría estar en el valor de los factores involucrados en las medidas preventivas, según afirman diferentes investigaciones europeas. Por ejemplo, cuando se calcula los gastos adicionales de las medidas preventivas recomendadas, costos fijos y variables son ponderados por igual, mientras que por varias razones los “ganaderos/influenciadores” tendrán una preferencia por uno de ellos. Para la mano de obra esto es aún más importante. Cuando se compara con otros tipos de medidas preventivas, los ganaderos prefieren cambios en la rutina de cosecha de leche (mano de obra) como última alternativa (Huijps et al., 2009), incluso cuando los gastos de otras intervenciones preventivas tenían el mismo valor. Las recomendaciones de diferentes instituciones de mastitis en el mundo desarrollado, aconsejan que cuando se sugiere implementar medidas preventivas para disminuir el nivel de incidencia/prevalencia de mastitis en el largo plazo, es necesario utilizar la Bioeconomía como base objetiva en los cálculos económicos y epidemiológicos, para así crear 7 SALUD MAMARIA 57% $600.000 Más del 57% de las vaquillas de reemplazo pueden llegar con infecciones al parto. una base sólida y medible que soporte las decisiones. Así, podemos saber cuáles son las consecuencias económicas y epidemiológicas de las decisiones que recomendamos o tomamos en relación a intervenciones que previenen, no la mastitis per sé, pero sí su contagio en el mediano y largo plazo. Para el asesor moderno que trabaja en salud de glándula mamaria y calidad higiénica de la leche, es importante saber que existen otros argumentos aparte de los económicos (Kristensen and Enevoldse, 2008). De hecho, los ganaderos no siempre toman el óptimo económico en sus decisiones. Hasta no hace mucho, las discusiones en relación a calidad de leche solo concernían a los aspectos medibles: presencia de grasa, proteína, RCS, cantidad de bacterias, y ausencia de residuos de antibióticos. La importancia de estos aspectos estaba anclada en las necesidades de los procesadores (Ma et al., 2000; Santos et al., 2003), y aún son, en la mayoría de los países productores de leche, parte de 8 d l e c h e . 2 0 1 5 Los gastos en medidas preventivas pueden ser vistos como ingresos adicionales por su impacto en reducir pérdidas debido a mastitis. un programa nacional de calidad de leche. Sin embargo, los productores hoy están cada día más condicionados por las exigencias del consumidor, quien demanda que los productos que compra sean producidos de acuerdo a ciertos estándares básicos (Korthals 2001), tales como bienestar animal (Ellis et al 2009) y consideraciones ambientales (Creamer et al 2002). Los costos de una MC o eliminación prematura de vaquillas (sin contar la pérdida futura de leche) pueden llegar a los $600.000 chilenos, solo por concepto de pérdida de los costos de crianza. Salud de glándula mamaria es un concepto que está asociado no solo a calidad de leche (Hogeveen et al2013). La mastitis es una enfermedad dolorosa, algunas veces con alta incidencia -que no es lo mismo que alta velocidad de contagio-, que afecta la salud mamaria, transformándose en un problema de bienestar animal. Por lo tanto, una precaria salud mamaria puede dañar la imagen pública de la leche. En Gran Bretaña, al querer optimizar el nivel de Bioseguridad y Bioeconomía de los predios lecheros, para prevenir la diseminación y contagio de enfermedades a los humanos y animales bajo una esfera de costos e inversiones razonable, se vio una resistencia significativa a esta implementación entre las partes interesadas (Gunn et al 2008). Los ganaderos también mostraron algún grado de resistencia para mejorar la Bioseguridad/ Bioeconomía del predio cuando esto beneficiaba a otros ganaderos que no habían mejorado la Bioseguridad por ellos mismos (Heffernan et al 2008). Algo similar sucede con el problema de mastitis. Hay un gran debate en el mundo desarrollado en relación a si el libre mercado es capaz de dirigir la demanda de los consumidores por productos con un cierto nivel ético en la dirección correcta (Verbeke 2009). 1. Medidas preventivas; gastos o ingresos adicionales Como ya se ha dicho, los costos económicos de mastitis, así como otros costos por enfermedades, consisten en pérdidas, como menor producción de leche por vaca/ año o retiro de leche por periodos de carencia durante 9 SALUD MAMARIA Si un rebaño de 1000 vacas tiene una frecuencia de 6% de tratamiento con antibióticos por MC por mes, estaría descartando aproximadamente 360 vaca/día de leche cada 30 días. tratamientos y eliminación prematura por mastitis, entre otros, y gastos, como uso adicional de antibióticos, desinfectante de pezones etc. (McInerney et al., 1992). Los gastos en medidas preventivas pueden ser vistas como ingresos adicionales por su impacto en reducir pérdidas debido a mastitis (Hogeveen et al., 2011). 2. El costo de mastitis: algunas reflexiones poco comunes Estudios internacionales muestran que en promedio el 73% de los empresarios lecheros subestiman las pérdidas por mastitis (Huijps et al., 2008). Los gastos netos combinados anuales de una infección intramamaria para un rebaño de 100 vacas en Alemania fue de € 22.000 (aprox. 21 millones de pesos chilenos). El reemplazo por mastitis significó un 20,7% de este total (Halasa et al., 2009). A nivel mundial, estimaciones publicadas de las pérdidas económicas por mastitis clínica se mueven entre $22.000 a $150.000 chilenos con tremendas fluctuaciones entre rebaños (Hogeveen et al., 2011). De estos, $67.000 son atribuidos a la baja de producción, $8.200 a incremento de la mortalidad, y $30.000 a costos de tratamientos y sus asociados (Bar et al., 2007). 3. Costos ocultos de la mastitis 3.1. Algunos reportes de pérdidas en producción de leche Un estudio irlandés, identificando los costos ocultos asociados a mastitis, indicado por varios rangos de RCS en estanque, reveló que el “Net farm profit” en predios con RCS en tanque entre 200.000 - 300.000 cél/mL de leche recibieron aprox. $220.000 chilenos/ha menos que aquellos predios que tuvieron un RCS de estanque <100.000 cél/mL de leche (Geary et al., 2012). En Australia, Larcombe and Shepard (2004) revelaron que las pérdidas de leche fueron de 3.4% en 300 días de producción de leche (5.500 L) por caso de mastitis clínica, es decir 187 L. En Nueva Zelanda, el National Herd Testing Database estima que las pérdidas por mastitis clínica llegan a 88.5 L/vaca/305 días de lactación. En Suecia, Hultgren y Svensson (2009) estimaron las pérdidas de leche en vacas primíparas en 9% en 305 días con producciones de cerca de 7.670 kg. En USA, Bar et al., 2007, revelaron pérdidas de 1.2 kg/ día en toda la lactación. El mismo autor encontró que las pérdidas de leche son responsables del 64% de los costos de mastitis clínica utilizando datos del New York State. 1 0 d l e c h e . 2 0 1 5 Estudios internacionales muestran que menos de un 30% de los empresarios lecheros valora adecuadamente las pérdidas por mastitis. En Alemania, Cha et al., 2011, estimaron que el 72.4% del total de los costos de una mastitis clínica es atribuible a las pérdidas de producción de leche. En Chile, estudios públicos de las pérdidas en vacas lecheras chilenas, en mi conocimiento, no existen. costos directos de cada caso son superiores a $150.000 (adaptado de Wilson, 2003). ¿Cifras chilenas? No hay. Debe ser que no existe este problema. 3.2. Pérdidas por mastitis clínica Las pérdidas por mastitis, solo por concepto de leche, pueden llegar a 1.181 kg/lactación (Wilson et al., 2004; Capurro et al., 2010). En el distrito de Wisconsin, USA, rebaños inscritos en el programa de mejoramiento de calidad láctea (n=181) reportaron que la mastitis clínica ocurre en 6-8 vacas por cada 100 vacas lactantes por mes, y estimaron que los 3.3.1. Costos de mastitis Más del 57% de las vaquillas de reemplazo pueden llegar con infecciones al parto (Roy et al., 2009, Ferdowsi et al., 2010; Castelani et al., 2013). Los costos de una mastitis clínica o eliminación prematura de vaquillas (sin contar la pérdida futura de leche) pueden llegar a ser de $350.000 - $600.000 chilenos, solo por 3.3. Pérdidas por mastitis en vaquillas 1 1 SALUD MAMARIA concepto de pérdida de los costos de crianza (De Vliegher et al., 2010; Steeneveld et al., 2011; Heikkilä et al., 2012). ¿Qué porcentaje representa la eliminación por mastitis de la tasa de reemplazo en el rebaño? ¿Qué herramientas de Bioseguridad existen para evaluar este riesgo? ¿Cómo predecir el riesgo de una vaquilla de tener una infección por S. aureus? ¡Chile no cuenta con cifras! Reportes sobre disminución de la producción de leche por mastitis clínica en vaquillas, arrojan cifras de entre un 1% a un 5% en toda la lactación (Myllys et al 1995; Barnouin et al, 2001; Oltenacu et al, 1994). Streptococcus uberis está asociado a disminuciones de 2.5 kg/día cuando la infección ocurre antes del parto o en las primeras dos semanas de lactación (Gröhn et al., 2004). Coagulasa negativa Staphylococcus ha sido asociado a una disminución de 3.2 kg/día a lo largo de todo el periodo de lactancia (De Vliegher et al 2004). 3.3.2. Costos de descarte prematuro Un estudio en Canadá constató que el 69% de las vaquillas (n=428) tenía una infección intramamaria antes de parto (Roy, 2009). El 2012, un estudio finlandés estimó que el costo del descarte prematuro por mastitis en vaquillas llega entre $350.000 – $900.000, solo por concepto de crianza (adaptado de Heikkilä, 2012). Al considerar la eliminación prematura de una vaquilla, se pierden en promedio 3-4 lactancias. ¿Cómo se compone el costo de reemplazo en su predio? No es lo mismo reemplazar una vaca que cumple su ciclo productivo de, por ejemplo, 5 lactancias, que una vaquilla de primer parto. ¿Cuál es su costo por reemplazo? ¿Está incluido el costo de pérdida futura y de costos de crianza? (Huijps et al 2009; Heikkilä 2012). 3.3.3. Negativo efecto en la longevidad Vaquillas tratadas por mastitis clínicas (MC) antes del parto o dentro de las primeras 2 semanas de lactancia tienen 3 veces más riesgo de ser eliminadas por problemas de mastitis dentro de un mes post tratamiento (Waage et al., 2000). 3.3.4. Costos de un tratamiento por mastitis con antibióticos El tratamiento de la mastitis consume la mayor cantidad de antibióticos en los predios lecheros (Ruegg 2009). ¿Es Ud. una excepción? En USA una vaca en ordeño puede llegar a recibir 6 dosis de antibióticos por lactancia y el 80% de ese uso está relacionado directamente con al control de la mastitis (Pol & Ruegg, 2006). Si un rebaño de 1000 vacas tiene una frecuencia de 6% de tratamiento por mastitis clínica por mes, estaría descartando aproximadamente 360 vaca/día de leche cada mes (60 casos, multiplicado por 6 días de descarte de leche por mes). A una producción 1 2 Termina un ciclo Estimados lectores, con esta entrega terminamos un periplo que constó de 12 publicaciones sobre salud de glándula mamaria y calidad higiénica de la leche. Espero haber cautivado y despertado su interés por la Bioeconomía y la Bioseguridad de la salud mamaria, y que de paso esta serie de artículos haya resultado entretenida y novedosa. Si no lo ha sido, es un buen momento para debatir enviando sus comentarios a mi email, [email protected], o a la Redacción de la revista. Quiero agradecer a los lectores que durante estos meses enviaron sus cuestionamientos y preguntas. Mi reconocimiento y gratitud para estos colegas inquietos y modernos. Deseo también agradecer a mis clientes productores y colegas asesores, que han abierto las puertas de sus planteles para dejar explorar el fascinante mundo de la Bioseguridad y la Bioeconomía dentro de la salud de la glándula mamaria y la calidad higiénica de la leche en Chile. Deseo saludar a las revistas internacionales, que gentilmente han publicado mis revisiones bibliográficas, permitiéndome aportar al mejor entendimiento de la mastitis y sus repercusiones en tierras lejanas. Finalmente, deseo agradecer a revista DLeche, por la posibilidad que me ha dado de escribir libremente, textos que en muy pocos casos han sido pensamientos personales, sino más bien los pensamientos y conclusiones de grandes científicos consolidados en el mundo de la salud de la glándula mamaria y que han aportado notablemente a la sociedad del conocimiento aplicado de las ciencias veterinarias modernas. Dr. Enzo Capurro de 20Lt/vaca/día con un precio de 190 pesos por litro, el valor del descarte podría llegar a 1 millón de pesos por mes. Multiplique este millón por 12 y tendrá las pérdidas por año calendario (adaptado de Ruegg, 2009). 3.3.5. Cura bacteriológica La cura bacteriológica en mastitis clínica va desde 53% (standard 3 días infusión intramamaria de antibiótico) hasta 75% (5 días de antibiótico vía infusión intramamaria y sistémico) (Steeneveld et al., 2011). 3.3.6. Pérdidas de sólidos totales En Irlanda, Geary et al., 2013, reveló una diferencia de hasta 29 kg/vaca/305 días menos de sólidos en rebaños con RCS de tanque entre 200.000 - 300.000 cél/ml de leche, comparado con rebaños con RCS <100.000 cél/ml de leche. Es decir, simulando lo siguiente: 29 Kg/vaca/305 d x 4 lactancias x 100 vacas x $5.500 pesos = $63.8 millones de diferencia entre 2 RCS de estanque menos costos, en este estudio. Cualquier error en el cálculo es involuntario. M A NE J O A L I M ENT A R IO Iris Lobos O. Ing. Agrónomo, MSc [email protected] Por Alfredo Torres B. Ing. en Alimentos, PhD [email protected] INIA - Centro Regional de Investigación Remehue Temporada Estival Cómo enfrentar la alimentación del ganado en veranos con déficit hídrico. E Durante el mes de noviembre precipitó la mitad del agua caída históricamente (52%) y en el mes de diciembre solo llovió un tercio (31%), lo cual ha provocado una disminución en la producción de forraje. Por otra parte, la figura 2 muestra las temperaturas entre los meses de septiembre y diciembre de 2014 y el promedio histórico de 37 años. En la gráfica se observa que las temperaturas no han sobrepasado el promedio histórico, por lo tanto no ha sido un problema para las plantas y animales. Las bajas precipitaciones ocurridas en los meses de noviembre y diciembre han influido sobre todo en las forrajeras de arraigamiento superficial, las cuales han disminuido su crecimiento. La condición climática que l comportamiento productivo de las praderas, los cultivos suplementarios y el ganado depende, entre otros factores, de las condiciones climáticas imperantes. Tanto las especies vegetales como animales tienen rangos de adaptación a condiciones climáticas determinadas, de acuerdo al cultivar o raza y a las características que estos tengan. Sin embargo, hay ocasiones en que las condiciones climáticas en un período determinado, difieren del promedio histórico al cual están adaptados animales y plantas, provocando disminución en la producción. Entre los meses de octubre y diciembre de 2014, se registraron precipitaciones más bajas respecto del promedio histórico de los últimos 37 años, como se puede observar en la figura 1. d l e c h e . 2 0 1 5 PRADERAS Y FORRAJES Durante este periodo se debe generar alimento para compensar parte del forraje conservado y cultivos suplementarios que obligadamente pudieran ser utilizados durante los meses de enero-febrero, a través de las siguientes opciones, que deben ser corroboradas con sus asesores. • Aplicar fertilización completa o al menos nitrógeno en dosis de 30-40 kg/ha, en las praderas de mejor condición y que estén en suelos de media a alta fertilidad considerando todos sus nutrientes y parámetros (ej.: sobre 15 ppm de P). Esta labor se debe realizar lo antes posible en otoño si existe humedad en el suelo (mediados de febrero hasta fines de marzo). La primavera recién pasada presentó buenas condiciones para el crecimiento de las praderas, por lo tanto debería existir una alta reserva de ensilajes y de buena calidad nutricional. ha ocurrido hasta este momento (inicios de enero 2015) ha sido más frecuente en los últimos años, por lo que los productores debieran estar preparados con cultivos suplementarios como nabos, raps forrajero, alfalfa y trébol rosado. Además, como la primavera recién pasada presentó buenas condiciones para el crecimiento de las praderas, debería existir una alta reserva de ensilajes y de buena calidad nutricional. Los productores que han tomado los resguardos mencionados anteriormente, no deberían presentar mayores problemas hasta el día de hoy. De persistir esta condición, de baja pluviometría, los productores pueden acudir a utilizar los forrajes conservados 1 4 y cultivos suplementarios que tienen destinados para el invierno, como coles forrajeras y rutabagas. En praderas de menor fertilidad de suelo se puede aplicar la misma medida, pero a igualdad de dosis se tendrá una respuesta menor al fertilizante aplicado, teniendo una respuesta casi nula en suelos que nunca se han fertilizado. Además, es posible que los potreros con menor fertilidad de suelo sean regenerados o sembrados con avena, ballicas anuales y/o de rotación corta (en tanto existan condiciones de humedad del suelo, entre mediados de febrero y fines de marzo). Si se opta por avena sola, usar hasta 120 kg/ha de avena grano o hasta 80 kg/ha de avena Strigosa, considerando que esta opción nos entregará un mayor volumen de forraje, pero de baja calidad (para animales en mantención). Si se decide por ballicas anuales y/o de rotación corta, usar dosis entre 30-35 kg/ha de semilla. 1 5 M A NE J O A L I M ENT A R IO de análisis de suelo, corregir en base a sus resultados y si se detectan otros nutrientes deficitarios, también deben ser aplicados. MANEJO DE VACAS LECHERAS • En el transcurso de periodos con déficit hídrico, no preocuparse tanto del rendimiento productivo individual. • Privilegiar la oferta de suplementos forrajeros a las vacas en producción que se encuentran en el primer y segundo tercio de su lactancia, junto al concentrado. • Decidir el uso del concentrado de acuerdo a su precio y el de la leche. En época de crisis alimenticia no entregar más de 4 kg/animal/día, a vacas con niveles menores de 15-20 litros de leche. Es muy importante considerar que 1 kg de concentrado puede costar hasta 6 veces más que un kg de materia seca de pradera. • Mantener sales minerales permanentemente disponibles para los animales (100-150 g/animal/día) cuando consuman alimentos de baja calidad nutritiva. • Secar las vacas que se encuentren en el último tercio de lactancia, con baja producción y que además tengan que parir en los próximos tres meses. • En general, cuidar al máximo la condición corporal de las vacas preñadas para que entren al invierno en buen estado. • Reducir la carga animal en el sector de lechería eliminando anticipadamente vacas de desecho, terneros machos u otras categorías. • En la medida que los rebrotes de la pradera sean insuficientes y que las vacas bajen su producción, aumentar la suplementación con ensilaje. • Siempre suministrar agua de bebida fresca y limpia a los animales sin importar donde se encuentren (potreros, sala de ordeña, callejones, etc.). • Los forrajes toscos (paja de cereales) son una alternativa alimenticia frente al bajo crecimiento de las praderas de pastoreo en veranos secos o cuando el forraje conservado (ensilaje) es limitante. Entregarlo directamente o cuando existe la posibilidad, tratarlo químicamente con soda cáustica, óxido de calcio, o urea, para mejorar su digestibilidad y contenido de proteína total. Para lo cual se debe tener en cuenta las especificaciones técnicas del caso. Para enfrentar este periodo, los productores deben estar preparados con cultivos suplementarios como nabos (en la foto), raps forrajero, alfalfa y trébol rosado. Si se desea asociar avena-ballica, para tener un buen volumen de forraje en el primer pastoreo, pero quedar con una buena pradera de ballica posteriormente, usar dosis de entre 30-50 kg/ha de avena Strigosa o avena grano respectivamente y 30-35 kg/ha de semilla de ballica. La fertilización al establecimiento debe ser de alrededor de 40 -50 kg/ha de N, 120 -150 kg/ha de P2O5 y 40-50 kg/ha de K2O. Si se tienen antecedentes de problemas de acidez, S, Mg, también deben ser considerados. • Regenerar las praderas permanentes en suelos de buena fertilidad, que por ataque de plagas, mal manejo o déficit hídrico se degradaron perdiendo 1 6 d l e c h e . 2 0 1 5 parte importante de las especies de alto valor forrajero. En este caso, establecer con dosis de 25 kg/ha de ballicas perennes o de rotación larga (5-7 años) junto a la fertilización de mantención que normalmente se realiza en otoño. Esta debe considerar alrededor de 30-40 kg/ha de N, 100 a 120 kg/ha de P2O5 y 30-40 kg/ha de K2O. Si se dispone MEDIDAS A FUTURO Tomando en cuenta que el fenómeno de déficit hídrico es cada vez más frecuente, es necesario que los productores ganaderos tengan presente para las próximas temporadas las siguientes medidas: • Mayor cantidad de ensilaje. Es necesario conservar una mayor cantidad de ensilaje, ya que parte de éste podría suministrarse en verano. Para ello en los potreros que se rezagarán para conservación, además de la fertilización de mantención en la fecha oportuna (última quincena de agosto primera quincena de septiembre) adicionar una dosis extra de N. Se estima que la respuesta de este nutriente en primavera es de al menos 12 kg de materia seca por kg de nitrógeno aplicado. • Época de parto. Evitar partos de fines de primavera y verano, porque estos tienen altos requerimientos de nutrientes a inicios de lactancia, lo que coincide con la época más crítica en el crecimiento y calidad de la pradera. De persistir la baja pluviometría, los productores pueden acudir a utilizar los forrajes conservados y cultivos suplementarios que tienen destinados para el invierno, como coles forrajeras y rutabagas. • Otras forrajeras. Establecer especies forrajeras que toleren en mejor forma la falta de agua (alfalfa, trébol rosado, chicoria, siete venas, pasto ovillo, festuca, festulolium y bromo). Los productores deben tener en cuenta que estas forrajeras no solucionan completamente el problema de alimentación, por lo que es necesario combinarlas con alimento extra como ensilajes, heno, paja y cultivos suplementarios. • Riego. Si el predio dispone de riego se podrían regar las praderas permanentes de mejor condición, las ballicas de rotación corta o los cultivos forrajeros (nabo, maíz, raps forrajero, entre otros). En este sentido, para aplicar esta medida se deben considerar los terrenos más fértiles y sin limitaciones de nutrientes, ni problemas de acidez para justificar el costo del riego. • Tranques acumuladores. En muchos predios es posible tener tranques que ayuden a mantener las napas más altas y conservar la humedad del suelo. También se pueden profundizar los pozos y norias que permitan mayor acumulación de agua de bebida. 1 7 TEN DENCI A S Por Rodrigo Arias Inostroza Ing. Agrónomo, PhD MSc in Animal Science Ser ganadero en el siglo XXI Cómo producir y no morir en el intento Actualmente la producción ganadera enfrenta grandes desafíos, derivados principalmente del cambio climático y de consideraciones ambientales y de bienestar animal que progresivamente impone el mercado. ¿Cuáles son las exigencias que se vienen para la producción y comercialización de los productos pecuarios? A continuación, algunos lineamientos para tomar nota e irse poniendo al día. E xiste consenso en la comunidad científica que el cambio climático está afectando diversas áreas de la economía a nivel mundial. En general, este fenómeno se asocia más con efectos negativos que positivos, aun cuando estos últimos también pueden ser una realidad, lo que dependerá de la región del planeta en la que nos situemos y la actividad (agropecuaria) a la que nos dediquemos. Por ejemplo, la incorporación de nuevas superficies al pastoreo y a la producción agrícola, producto del retroceso de los campos de hielos o de la nieve, podría considerarse como un efecto positivo del cambio climático, así como también aumentos en los rendimientos debido a cambios en las temperaturas medias y distribución de las precipitaciones. Por otra parte, estos mismos elementos pueden ser causa de menores rendimientos por menores reservas de agua para riego o bien por una mayor presencia de plagas y enfermedades, todo dependerá del lugar en que uno se encuentre. En este contexto, cabe señalar que estudios recientes a nivel nacional, proyectan un desplazamiento de la actividad agrícola hacia la zona centro-sur, lo que implica la incorporación de cultivos que antes estaban limitados fundamentalmente por razones de tipo climático. Un ejemplo evidente de lo anterior se aprecia en la zona de Temuco al sur, en donde se observa una creciente superficie de especies frutales que generan una mayor presión por el uso del suelo. La deforestación -para sumar nuevas superficies a la actividad agrícolaes ampliamente resistida por la comunidad internacional. 1 8 d l e c h e . 2 0 1 5 1 9 TEN DENCI A S El uso de residuos orgánicos para la producción de biogas se irá imponiendo en las grandes lecherías, por las ventajas comerciales que significa su conversión en energía eléctrica. En forma simultánea, y en estrecha relación al cambio climático, se aprecia una creciente preocupación, tanto de la comunidad mundial como de los gobiernos, por los temas medioambientales. Hace más de una década la mayoría de los países se adhirieron a un tratado internacional denominado “Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático” (http://unfccc.int/2860.php), con el fin de estudiar alternativas para reducir el calentamiento global y adoptar medidas de mitigación que disminuyan la velocidad del mismo. La primera reunión fue en Berlín (1995), y recientemente, del 1 al 12 de diciembre, se celebró en Lima la XX Conferencia Internacional sobre el Cambio Climático, mientras que la versión XXI tendrá lugar este año en Paris. Asimismo, el Grupo Intergubernamental sobre el Cambio Climático (http://www.ipcc.ch), creado en 1988, ha examinado las investigaciones científicas y ofrecido a los gobiernos resúmenes y asesoramiento sobre los problemas climáticos. Un tercer elemento a considerar, antes de entrar al tema central de este artículo, dice relación con la demanda de alimentos. El aumento de la población mundial y las mayores 2 0 d l e c h e . 2 0 1 5 expectativas de vida son elementos relevantes a la hora de explicar el aumento en la demanda de alimentos. En efecto, se estima que cada 11 años la población mundial crece en mil millones de habitantes, lo que antes demoraba 130 años. Sin embargo, no se trata tan solo de más bocas que alimentar, sino también de un mayor poder adquisitivo, en especial en los países desarrollados y en vías de desarrollo. Es un hecho que los países con mayores ingresos están dispuestos a pagar más por alimentos diferenciados, más sanos y menos contaminantes. Esto se debe en gran medida a la mayor cobertura que estos temas han tenido en los medios y en Internet. A la luz de lo antes expuesto, resulta lógico preguntarse ¿Cómo afectará este escenario la producción ganadera futura, especialmente la de carne y leche bovina?, o bien ¿Cuáles serán las demandas ambientales para la comercialización de los productos pecuarios? INTENSIFICACIÓN Y CONFINAMIENTO En la actualidad la intensificación de la producción pecuaria es un tema de gran interés, debido a los efectos que puede tener en la disponibilidad de alimentos, la utilización de los recursos y la contaminación ambiental. En general, se asocia a los sistemas de producción agropecuarios intensivos con mayores problemas ambientales. Lo anterior debido al alto uso de insumos externos (fertilizantes, combustibles, etc.) que generan una pérdida de biodiversidad, degradación del suelo, contaminación de las aguas, aire y suelo. Sin embargo, la mayor parte de estos estudios basan sus análisis en la unidad de superficie como referencia y no consideran las actuales regulaciones ambientales que se están imponiendo en muchos países. El aumento de sistemas productivos altamente intensivos y de confinamiento, durante los últimos 25 años, se explica por la mayor demanda de productos de origen animal dando origen al concepto de “ganadería industrial”. Ésta corresponde a sistemas en la que menos del 10% del alimento es producido dentro de la explotación (Livestock and the Environment, 1996). Pero, es preciso señalar que los conceptos de “intensificación” y “confinamiento” no son sinónimos. En efecto, la intensificación se define como la adopción de un sistema de producción que resulta en una mayor producción (más producto por unidad animal o por superficie), es decir, más kilos de carne por hectárea o mayores rendimientos de la canal, o bien más litros de leche por vaca o por hectárea. Bajo este concepto se pueden incluir una serie de herramientas tecnológicas que impactan positivamente la producción (genética, sincronización de celos, inseminación artificial, dietas balanceadas, etc.). Por otra parte, el confinamiento se define como una alta concentración de animales en una superficie reducida. Por lo tanto, los sistemas de confinamiento son una alternativa más de intensificación, pero esta última no necesariamente implica confinamiento. En Estados Unidos son comunes las engordas a corral y lecherías con altas densidades animales, es decir un alto nivel de confinamiento e intensificación (>10.000 cabezas en superficies reducidas). Indudablemente la ganadería industrial, como hasta ahora la conocemos, genera problemas ambientales y de bienestar animal. Pero estos sistemas surgen de la necesidad de aumentar la productividad de alimentos y de deshacerse de los residuos, los que se producen en gran cantidad y en reducidas unidades de superficie. Cabe señalar que en Chile gran parte de la ganadería de carne presenta baja intensificación, mientras que la ganadería de leche es más intensificada y tecnologizada. Si bien no existen estadísticas oficiales, se estima que el nivel de confinamiento es más bien bajo, dado los sistemas productivos imperantes, especialmente en la zona centro-sur del país. Algunos creen que para asegurar la sustentabilidad y reducir la contaminación se debe volver a sistemas menos intensivos (“más naturales”), e incluso los más extremistas proponen eliminar la proteína de origen animal, pues habría otras fuentes disponibles para satisfacer los requerimientos de las personas. Pero estas propuestas parecieran no tener futuro si consideramos que la población mundial aumentará a unos 8.20 0 millones para el año 2030 y, con ello, la demanda de proteína y productos de origen animal. Así entonces, la propuesta anterior implicaría una menor producción de alimentos y una mayor demanda por suelo, aumentando con ello la deforestación para incorporar nuevas tierras a la producción, más uso de combustibles, fertilizantes y agroquímicos, resultando además en una mayor emisión de gases efecto invernadero (GEI). Los sistemas intensivos y particularmente los CAFO (de sus siglas en inglés Operación de Alimentación de Animales Confinados) se asocian con mayores producciones de La ganadería industrial, como hasta ahora la conocemos, sin duda genera problemas ambientales y de bienestar animal. Pero estos sistemas surgen de la necesidad de aumentar la producción de alimentos. residuos orgánicos (heces y orina) en comparación a los sistemas convencionales o más extensivos y, por lo tanto, tienden a ser negativamente evaluados. En efecto, en 1992 la Unión Europea elaboró una Política Común Agrícola (CAP, de sus siglas en inglés) para regular la producción, el comercio y procesamiento de productos agrícolas. Posteriormente, en 1999 se crearon los marcos regulatorios medioambientales (AES, Agri-Environmental Schemes) con la intención de promover métodos que sean compatibles con la protección del medio ambiente. Estas políticas indudablemente tienen un efecto en las exigencias que los países de la Unión Europea imponen a sus productores y en consecuencia a los productos que se importan, especialmente en el ámbito ambiental y de bienestar animal. Es lógico pensar que, dada la importancia de estos temas, la mayoría de 2 1 TEN DENCI A S los países adscriba exigencias de esta índole en el mediano a largo plazo. En efecto, en algunos países el etiquetado de los productos animales según el método de producción es obligatorio, con ello los consumidores tienen la posibilidad de apoyar la protección ambiental y el bienestar animal. Este es el escenario al que los productores nacionales deben acceder para comercializar sus productos, por ello resulta vital evaluar los sistemas productivos, ya que según un informe de la CEPAL (2009), Chile se encuentra entre los países de América Latina con mayor vulnerabilidad frente a las nuevas exigencias ambientales. Se debe considerar además que en agosto de 2010 el Gobierno de Chile presentó su compromiso de realizar acciones de mitigación con el objeto de limitar en un 20% las emisiones de GEI respecto de la proyección del escenario de referencia al 2020. Sin duda, esto tendrá un efecto en el sector pecuario toda vez que en Chile el sector agrícola es el tercero en importancia en emisión Volver a sistemas menos intensivos y “más naturales” resulta inviable si consideramos que la población mundial aumentará a unos 8.200 millones para el año 2030 y con ello la demanda de proteína animal. de GEI detrás del sector energía y procesos industriales. Además, de la producción total de metano del sector agrícola, casi la totalidad (>95%) está asociada a la fermentación entérica (fundamentalmente a la producción de rumiantes). Otro aspecto que se debe considerar, dice relación con el cómo se realiza el análisis de tipo económico y productivo de las explotaciones pecuarias, las que tradicionalmente se han efectuado en términos de unidad de superficie, es decir, $/ha o kg/ha. Sin embargo, con este nuevo enfoque basado en la sustentabilidad, el análisis debiera reorientarse hacia la unidad de producto obtenido, es decir, GEI/residuos por kilo de carne o por litro de leche. 2 2 d l e c h e . 2 0 1 5 El etiquetado según método de producción, permite a los consumidores apoyar la protección ambiental y el bienestar animal. INTENSIFICACIÓN Y MEDIOAMBIENTE Capper y col en 2009 publicaron un estudio respecto del impacto que la intensificación ha generado en Estados Unidos. Ellos evaluaron el impacto ambiental de un sistema de producción de leche tradicional (año 1944) versus uno moderno (año 2007) en términos de los GEI. Los sistemas modernos (más intensificados) muestran un aumento significativo de la producción de leche (58,5%) con un menor número de animales por litro de leche producida (~78% menos animales). Esto implica menos producción de GEI (3,66 vs 1,35 kg *CO2 eq/kg leche) y de estiércol por litro de leche producido, así como también un menor uso del recurso suelo. No obstante, cuando las comparaciones se hacen por individuos (animales) los valores de GEI y residuos son mayores en los sistemas más intensivos (modernos). Otro estudio realizado en Irlanda (Casey y Holden, 2005), señala que en la medida que un sistema se intensifica (> carga animal, > fertilización N y uso medio de concentrados) se reduce la cantidad de GEI por litro de leche, mientras que aumenta la cantidad de GEI por hectárea. Similares respuestas han sido observadas en sistemas de producción de carne por Harper y col (1999), quienes reportaron menores producciones de GEI en sistemas más intensivos respecto de sistemas convencionales (0,23 vs. 0,07 kg CH4/ animal para dietas 100% praderas vs. dietas con 80% de granos respectivamente). McGinn y col (2011) reportaron valores similares de producción de CH4 (0,141 kg/animal) para animales en condiciones de pastoreo en Australia. A la fecha, en Chile no existen estudios que evalúen la producción de GEI en función de la dieta, lo que representa un desafío para los investigadores nacionales. Sin embargo, el mayor desafío para reducir los GEI no se encuentra necesariamente en las engordas, las que dependiendo del precio del mercado pueden incorporar más granos o alimentos de mayor digestibilidad en la dieta. Es en la crianza donde se presentan los mayores desafíos, pues cerca del 80% de las emisiones GEI del sector bovino de TEN DENCI A S se intensificará reduciendo las superficies pastoreadas, aumentando el uso de cultivos o granos para mejorar la conversión (kg alimento por kg de carne/leche producida) y con ello la eficiencia productiva de los animales. En este contexto, hace algunos años se está trabajando en la búsqueda de animales de alta eficiencia en base a mediciones del consumo residual de alimento (RFI = Residual Feed Intake). La idea es seleccionar aquellos animales que presenten mayor eficiencia en desmedro de aquellos que consumiendo igual o más alimento producen menos. Por último, en el caso de los sistemas intensivos y especialmente en los de animales confinados, se debe poner especial cuidado al manejo del estiércol ya que éste es un potencial agente de contaminación ambiental y de riesgo para la salud humana. Los residuos líquidos y sólidos son generalmente almacenados en pozos o en pilas de compostaje para posteriormente ser aplicados a praderas o campos para reciclar los nutrientes que se encuentran en ellos (fundamentalmente N, P y K) y mejorar las propiedades físicas y químicas del suelo. Es esperable que las regulaciones en el manejo del estiércol cobren cada vez mayor relevancia. En este En el futuro se debiera contar con tecnologías de intensificación que mejoren la eficiencia productiva, elemento clave en el negocio pecuario ya que determina la utilidad final que logra el productor. sentido, un tema de estudio relativamente nuevo a nivel internacional es el destino y transporte de bioaerosoles asociados al manejo de estiércoles en sistemas de producción intensivos y CAFO. Estos bioaerosoles son pequeñas partículas de origen biológico que se mueven en el aire, que en este caso pueden transportar agentes potencialmente dañinos para los seres humanos (virus, bacterias, etc.). Adicionalmente, las pilas de compostaje, pozos y material aplicado en praderas también generan GEI (óxido nitroso, metano) y amoníaco (ver figura). Actualmente se están realizando diversos estudios para determinar cuál Los residuos sólidos si bien son una fuente interesante de nitrógeno, fósforo y potasio, de no mediar una tratamiento adecuado pueden convertirse en fuente de contaminación ambiental con riesgo para la salud humana. carne provienen de este sector productivo, según estudios realizados en Canadá. En Europa y en Estados Unidos la intensificación en la producción pecuaria es una realidad que ha permitido satisfacer la demanda de alimentos. Sin embargo, estos sistemas han causado un impacto negativo en el ambiente a través de los años producto de la falta de políticas y normas regulatorias. Hoy en día estas políticas y estándares son una realidad en muchos países (no aún en Chile). Su implementación permitiría mantener o aumentar los niveles productivos sin perjudicar los recursos naturales y al mismo tiempo reducir los GEI. En el futuro debiéramos contar con tecnologías de intensificación que mejoren la eficiencia productiva, elemento clave en el negocio pecuario ya que determina 2 4 d l e c h e . 2 0 1 5 Según un informe de la CEPAL, Chile se encuentra entre los países de América Latina con mayor vulnerabilidad frente a las nuevas exigencias ambientales. la utilidad final que el productor logra. Estas tecnologías son una necesidad, ya que en todos los escenarios evaluados por diversos organismos internacionales se proyecta que la producción bovina, y de rumiantes en general, En la medida que un sistema se intensifica, se reduce la cantidad de GEI por litro de leche, mientras que aumenta la cantidad de GEI por hectárea. 2 5 TEN DENCI A S Ciclo de vida de GEI en un sistema de producción de carne (adaptado de Beauchemin y col., 2010). es el manejo que genera menores cantidades de GEI. A modo de ejemplo se puede señalar que la aplicación subterránea resulta en menos producción de GEI que el desparramar los residuos líquidos. Asimismo, se debiese evitar el movimiento de las pilas de compostaje pues esto aumenta la producción de GEI. IMPLICANCIAS Es evidente que todos los sistemas de producción pecuaria tienen un impacto ambiental. La idea entonces es que éste sea mínimo, pero que al mismo tiempo maximice la cantidad de productos obtenidos para mejorar la rentabilidad económica del negocio y satisfacer la creciente demanda de alimentos. Basados en las proyecciones de cambio de temperaturas y precipitaciones para el territorio nacional, es posible especular que en el mediano y largo plazo existirá una mayor competencia por el uso del suelo en la zona centro-sur del país, especialmente en el valle central. En consecuencia, los sistemas ganaderos serán forzados a moverse a sectores marginales que en general tienen menor potencial productivo o bien deberán mejorar la eficiencia mediante la intensificación, tal y como ocurrió en la zona central con el boom de la fruta. En ambos casos, el manejo animal (bienestar), nutricional y de los residuos cobrará mayor relevancia toda vez que serán exigibles a la hora de comercializar los productos. Como dijera Einstein, “si se buscan resultados distintos, no hay que hacer siempre lo mismo”. Por ello, los productores deben estar atentos y tomar las decisiones correctas, acordes a la realidad social, económica y productiva que le toque enfrentar. *Los gases efecto invernadero incluyen dióxido de carbono (CO2), metano (CH4) y óxido nitroso (N2O). Estos dos últimos tienen un mayor potencial de calentamiento de la atmósfera que el CO2 (25 y 298 veces más que CO2, respectivamente según IPCC, 2007). En conjunto estos gases se expresan como equivalentes CO2 (CO2 eq). 2 6 d l e c h e . 2 0 1 5 R E P O R T A J ES Exportación de vaquillas a China El Análisis FINO En los últimos meses, el mercado lechero nacional se ha visto remecido por la acción simultánea de tres empresas nacionales -Fegosa, Cooprinsem y Tattersall- que como representantes o asociadas a firmas de origen brasilero, australiano y holandés, se encuentran en pleno proceso de compra de vaquillas lecheras para exportar a China, provocando que los precios de estos animales hayan experimentado un alza importante. No obstante, después de las primeras cuentas alegres y la algarabía generada por la “bendición asiática”, han comenzado a aparecer cálculos y análisis más templados, que ponderan la publicitada conveniencia del negocio. 2 8 d l e c h e . 2 0 1 5 Fotos: Gentileza Departamento de Comunicaciones SAG L a exportación de vaquillas a China hace rato viene siendo tema obligado en todos los potreros, pasillos de ferias ganaderas y mesas de café en Osorno, Valdivia y Puerto Varas. Habiendo abordado el tema en la edición N°78 (diciembre 2014), esta vez DLeche ha querido profundizar en las variadas aristas de esta coyuntura noticiosa, incorporando a la conversación a diversos especialistas cuyas opiniones tienen un valor orientador para nuestros lectores. Nuestra idea es que los actores lecheros, principalmente los productores, puedan disponer de fundamentos técnicos para tomar decisiones acertadas frente a las nuevas opciones que ofrece el mercado. El lunes 12 de enero, a no pocos actores sectoriales les sorprendió leer en la página 3 de la sección Economía y Negocios de El Mercurio, el titular que rezaba “Chinos pagan el doble en Chile por vaquillas y envíos llegarían a US$20 millones este año”. Expresado de esta forma, se entendía que los hijos de Pekín estarían pagando el doble a los chilenos respecto de lo que pagan a los lecheros de los otros países exportadores (Nueva Zelanda, Australia y Uruguay). En absoluto. Lo que en realidad se quería señalar es que, en las ferias chilenas las vaquillas lecheras se pagan a $1.000 el kilo como carne para matadero, versus los $2.000 que pagan los chinos. Es decir, efectivamente “el doble”, pero en relación al mercado interno de la carne. Interpretación de curiosa metodología, toda vez que utiliza como parámetro comparativo un rubro distinto al lechero. ¿Se puede valorizar ganado traduciendo a kilos de carne décadas de selección alta genética lechera? La comparación que hace el “decano” es, para muchos, cuestionable, por cuanto enfatiza en la “oportunidad” que significa aprovechar una coyuntura, pero desdeña la posibilidad de determinar técnicamente el valor real de nuestra genética lechera, a todas luces superior a la uruguaya o la neozelandesa. Se sabe, por conspicuos exponentes del sistema neozelandés en Chile, que la genética de la isla oceánica es de 4.000 a 5.000 litros, mientras que la genética nacional es de 7.000 a 9.000 litros, y también 12.000 (para que no se ofendan productores de las ligas mayores). Entonces, en medio de la alegría generada por esta lluvia de “maná asiático”, quizás los productores chilenos debieran preguntarse: ¿Los chinos están pagando un valor justo, o la cifra está muy por debajo de lo que debiera pagarse por una genética del más alto nivel, que por años han labrado los cultores nacionales? Dicho sea de paso, y volviendo al artículo de El Mercurio, resulta llamativo leer en sus páginas que “el 60% de las hembras de lechería se venden a la industria 2 9 R E P O R T A J ES de la carne”. En efecto, el matutino del grupo Edwards pone esta ilógica cifra en boca del gerente general de Tattersall, Alejandro Vial, con quien nos comunicamos para saber de dónde había salido ese dato. El ejecutivo manifestó a DLeche que fue mal interpretado. REPRODUCCIÓN: LA VARIABLE CLAVE Si hacemos un ejercicio básico considerando un rebaño de 500 vacas, cuyo reemplazo es de 25% al año, ese productor necesita 125 vaquillas para mantener el tamaño de su hato. Bajo un supuesto teórico generoso, donde de las 500 vacas paran el 80%, ellas producirían 200 hembras en el ciclo de un año, y restando una complaciente mortalidad de 15%, quedarían 45 terneras para la venta. Es decir, solo el 22% de las hembras nacidas podrían salir -vía venta o exportación- en un predio que no tiene interés en crecer. Consultado sobre este tema, Alejandro Luco, gerente de ABS Chile, señala que el precio pagado por vaquilla deja un buen margen a la mayoría de los productores, sin embargo, advierte que es importante analizar cuál es el impacto que tiene eliminar esa genética en la producción de leche futura. Así, si un productor es ineficiente en el ítem reproducción, también lo será en la crianza y hasta el encaste, y esto se evidencia en cuanto no ha podido crecer en el número de vacas en los años anteriores. “En este tipo de productores, la venta de vaquillas será por supuesto un mal negocio, porque estos ingresos inmediatos los va a perder en venta de leche la temporada siguiente”. Según enfatiza Luco, el productor debe hacer el cálculo entre lo que le ingresa hoy por la venta de vaquillas (debe tener claridad que aproximadamente solo la mitad de la venta es utilidad, la otra mitad es el costo de criar la vaquilla) y el ingreso que no va a recibir por menor producción la temporada siguiente. En estas circunstancias, lo más probable es que este productor, cuando se percate que tiene menos leche para vender, tendrá que esforzarse por retener animales, es decir, va a disminuir la tasa de eliminación tradicional, “y la consecuencia de esto es que se verá obligado a retener los ‘animales problema’, añadiendo otro costo a su lechería”, advierte Luco. Otra alternativa es aumentar la producción por vaca o por hectárea, pero esto no es gratis, por cuanto obliga a incrementar el costo de producción, afectando el margen de ese litro adicional de leche producido. La tercera opción es salir a comprar vaquillas. Alejandro Luco hace notar que, por otro lado está aquel productor que tiene buenos indicadores reproductivos, buena crianza de vaquillas (baja mortalidad hasta el parto y encasta con 14 meses) y una tasa de eliminación menor a la oferta. “Este productor cuando vende hace un buen negocio, porque está transando solo el excedente de la reposición, siendo capaz de mantener maximizada la producción de leche en su predio”, sostiene el gerente de ABS Chile. Cuando se analiza la realidad nacional a partir de la sociología económica, resulta evidente que un grupo de individuos haciendo algo particular puede terminar afectando a la sociedad en su conjunto. Tomarse una copa de licor o varias tiene efectos sobre un individuo, pero cuando un alto porcentaje de la población comienza su alcoholismo a los 15 años el problema es nacional, porque “ ” 3 0 d l e c h e . 2 0 1 5 Para un productor que es ineficiente en el ítem reproducción, la venta de vaquillas será un mal negocio porque estos ingresos inmediatos los va a perder en venta de leche la temporada siguiente. Alejandro Luco afecta la productividad y en definitiva el desarrollo y el progreso económico del país. Y así ocurre con muchas prácticas individuales refugiadas en la libertad de hacer lo que al individuo le venga en ganas. Sin embargo, para el doctor Luco es natural que en un país tan liberal en materia económica como lo es Chile, un negocio como la exportación de vaquillas esté supeditado a la ley de la oferta y la demanda, principio básico del libre mercado. En consecuencia, según el ejecutivo, resulta absurdo criticar a aquel que hizo un buen negocio vendiendo vaquillas a China, aunque esto eventualmente pueda afectar a la masa bovina local. Lo que sí es objetable, agrega, “es aquel productor que es ineficiente, que obtiene baja o nula El SAG ha supervisado desde cerca el proceso. En la foto, el director Ángel Sartori asegurándose del correcto cumplimiento de los protocolos.. rentabilidad en su negocio, afectando la producción de leche nacional”, subraya. Claramente, la venta de terneras o vaquillas es un buen negocio en el corto plazo, pero puede llegar a ser peligroso si no se sacan bien las cuentas. Hablar de certezas en el mundo lechero nacional resulta complejo, porque cada plantel es una realidad particular, con su propio estilo, objetivos, manejos, etc., razón por la cual los consultados en este reportaje se mostraron reticentes a aportar cifras, resguardándose de objeciones de especialistas que eventualmente manejan datos diferentes. No obstante, el doctor Felipe Arias, encargado de Servicios Técnicos de ABS, se aventura con algunos números. “Si bien un 25% de eliminación de vacas es bastante común de encontrar, la lógica indica que para una lechería estabilizada en su masa esta cifra resulta 3 1 R E P O R T A J ES “ ” Lecherías que no están en proceso de crecimiento y tienen buenos niveles reproductivos, muestran tasas de eliminación superiores al 30%, por lo cual se debería ser muy cuidadoso al analizar este punto. Felipe Arias Funcionarios del SAG junto a un representante de la empresa exportadora Minerva, durante la revisión del ganado en el predio cuarentenario, previo al embarque. relativamente baja, lo que implicaría que existe una retención de animales por ineficiencia reproductiva. En este escenario la venta de vaquillas pondría una nueva dificultad para mantener el tamaño del rebaño”, enfatiza el especialista. Según Arias, “lecherías que no están en proceso de crecimiento y tienen buenos niveles reproductivos en vacas y vaquillas, muestran tasas de eliminación superiores al 30%”, por lo cual se debería ser muy cuidadoso al analizar este punto. “Esta situación puede ser aún más complicada 3 2 d l e c h e . 2 0 1 5 si no se tiene un buen manejo reproductivo o las vaquillas logran un peso de encaste tardío, lo que demora su entrada a producción”, agrega. EL ASPECTO SANITARIO Y EL VALOR DE LA GENÉTICA En un tema que precisa ser analizado desde diversas perspectivas, la opinión del doctor Arturo Scheidegger resulta indispensable. Asesor predial de dilatada trayectoria internacional, Scheidegger ha sido clave en el desarrollo de varias lecherías de alto nivel tecnológico en Uruguay, país que a la fecha ha exportado varios miles de vaquillas, no solo a China, sino que también a México y Medio Oriente. Su experiencia en el país de la murga, le ha permitido conocer la opinión de productores y veterinarios que llevan años haciendo este negocio, y que aseguran que sus resultados han sido favorables: no solo vendieron a buen precio parte de su crianza al exterior, sino que además se valorizaron los reemplazos vendidos dentro del país, debido a su escasez, sostienen. El lado negativo -agrega Scheidegger- ha sido el aspecto sanitario, ya que al exportar animales negativos a leucosis (entre otros requisitos), quedaron en el país las hembras positivas, y hoy día gran parte de las vacas uruguayas tienen la enfermedad. No obstante, es interesante destacar que la producción de leche no ha sido afectada, destaca el profesional, “porque como la producción de Uruguay es principalmente pastoril, pero con fuerte suplementación, la reacción a una mayor demanda ha sido la intensificación del sistema de producción, y esto depende más del precio de la leche que de la disponibilidad de reemplazos”. Otra visión interesante la aporta el doctor Javier Burchard, médico veterinario chileno y actualmente uno de los principales actores en el desarrollo lechero chino, desde la perspectiva sanitaria y productiva. Para el consultor internacional, la discusión sobre este tema ha adolecido de elementos objetivos, centrándose en elementos meramente especulativos. “Aún no existe claridad respecto al negocio que está haciendo China, y esto hace muy difícil establecer un escenario de discusión”, sentencia. “Estimo que habrá que esperar el ciclo completo del negocio, de modo que se conozcan los pormenores, y solo entonces podremos saber si fue un buen negocio para los productores”. Burchard, quien dice no saber con precisión el tipo de animales que exportó Chile ni cómo se estableció 3 3 R E P O R T A J ES su valor, comenta la enorme complejidad técnica que implica calcular un precio justo para una ternera o vaquilla de exportación. “Obviamente, y en forma muy simple, un productor que vende sus animales tiene que percibir por lo menos los costos en que incurrió al criarlos, más un lucro razonable. Los costos de crianza no son muy difíciles de establecer, pero el cálculo se complica cuando se trata de estimar el valor monetario de la genética, que se le debería sumar al costo de crianza. Porque, hay “ ” En Uruguay el lado negativo ha sido el aspecto sanitario, ya que al exportar animales negativos a leucosis quedaron en el país las hembras positivas, y hoy día gran parte de las vacas uruguayas tienen la enfermedad. Arturo Scheidegger que entender que no se está vendiendo la crianza, sino que la crianza más su genética”, explica. “La situación se complica aún más si se quiere estimar el valor de la producción vitalicia del animal, que se deja de percibir por la venta prematura”. Por otra parte, agrega Burchard, habría que hacer la comparación con la alternativa de no vender y destinar esos animales a producir leche, la cual se podría comercializar en el mercado internacional, es decir exportar leche y no animales, fomentando el trabajo en el país de origen. “Es un cálculo aún más complejo, pero sin duda necesario de considerar”. 3 4 d l e c h e . 2 0 1 5 Para Burchard, más allá de la conveniencia o no del negocio, lo importante es prevenir un deterioro de la situación de los productores, “los cuales siempre están corriendo riesgos producto de los vaivenes de un capitalismo globalizado que en algunas ocasiones puede llegar a ser tóxico”. MÁS QUE CIFRAS Por último, en la intención de obtener más elementos de análisis, conversamos con el médico veterinario Ricardo Vidal, reconocido consultor en temas de inversión y gestión agrícola, para quien la venta de vaquillas a China constituye una interesante alternativa para los productores chilenos, por los altos precios que se están pagando. Según comenta Vidal, vender hembras de 250-300 kg a un precio de $2.000 a $2.200/kg, o incluso más por animales de menor peso, le reporta un atractivo rédito a aquel productor que tiene las condiciones zoosanitarias para acceder a este mercado, es decir que su rebaño esté libre de Brucelosis, Tuberculosis, Leucosis, Paratuberculosis y Diarrea Viral Bovina. “Si se consideran los costos de producción de este tipo de animales, que fluctúan entre $780 y $1.000 por kilo (US$1,26 a US$1,61*) -según su eficiencia productiva, sistema de producción, edad y desarrollo, época de nacimiento, entre otros factores- la venta a China plantea la posibilidad de conseguir márgenes que no son frecuentes en esta actividad, y menos aún en la etapa de crianza-recría, la que usualmente presenta márgenes bajos y que es vista como una actividad subordinada y necesaria para crecer o mantener el rebaño y así darle sustentabilidad al negocio lechero”, argumenta. Sin embargo, agrega, estas auspiciosas condiciones de precio pueden obnubilar a ciertos productores, que no logran visualizar que se están enfrentando a una situación potencialmente riesgosa. “El riesgo está en la tentación de vender no solo los excedentes, sino que también la reposición necesaria para mantener el rebaño (20%-30%, según el caso). En tal escenario, el productor estará hipotecando su producción futura, o limitando su crecimiento”, advierte el gerente de Gestionagro y profesor adjunto de la Facultad de Agronomía de la Universidad Austral de Chile. Por otro lado, el profesional ve difícil que la exportación de vaquillas se consolide como un negocio masivo, ya que existen claras limitaciones como son las exigencias sanitarias y el tipo de vaquilla requerida, reduciendo el espectro de productores habilitados para participar de la venta al exterior. No obstante, acota Vidal, sería deseable que el proceso exportador se pudiera extender en el tiempo, ya que contra la decisión de “vender sin Los embarques se han realizado bajo estrictos controles sanitarios, de acuerdo a lo establecido en el protocolo firmado entre los ministerios de Agricultura de Chile y China. evaluar” de algunos, “a otros los instará a volcar su mirada hacia la crianza-recría, mejorando sus niveles de eficiencia económico-productiva y sus condiciones sanitarias, lo que les permitiría participar de este negocio incorporándolo a sus esquemas como un elemento adicional que le otorga sustentabilidad a sus sistemas lecheros, redundando finalmente en una mejora de la empresa en su globalidad”. El principal problema que enfrentan los productores chilenos, en este y otros casos, dice Vidal, es el tomar decisiones sin considerar todos los elementos involucrados y, sobre todo, sin saber cuál es la situación particular de su 3 5 R E P O R T A J ES EL SEMEN SEXADO NO ES PARA TODOS Ante el éxodo de animales que está viviendo el sector, el uso de semen sexado ha surgido como una opción estratégica para asegurar el nacimiento de hembras y de esta manera no afectar la masa y la reposición necesaria para mantener o incrementar la producción de leche. Es cierto que han aumentado las ventas, comenta Alejandro Luco, “pero el semen sexado tiene un valor mayor, el doble de una dosis convencional, y su fertilidad es entre 15 a 20% menor”. Luco enfatiza en que el sexado no es para todo el mundo, ya que es necesario tener una buena tasa de concepción al primer servicio en las vaquillas, ojalá no menor al 60% con semen convencional, de tal manera que se pueda conseguir una preñez de alrededor de un 40% a 45% al primer servicio en vaquillas de 14 a 16 meses”, sentencia. Según la experiencia del doctor Scheidegger, con el semen sexado se experimenta una baja significativa de la preñez, no obstante esto depende de cada predio, sostiene. “Cuando la fertilidad de las vaquillas no es óptima con semen convencional, puede ser un desastre el uso del semen sexado, perdiendo el beneficio de lograr algunas hembras extras y llegando con animales mucho más viejos al primer parto”. En cambio, en lecherías bien manejadas y con buena fertilidad, se pueden mantener buenas tasas de concepción (alrededor del 60%) utilizando semen sexado. De modo que, usar o no semen sexado, dependerá de la fertilidad actual del rebaño, explica el asesor. “Si la fertilidad es buena y usa semen sexado en los dos primeros servicios de las vaquillas, sin duda que obtendrá más hembras, sin atrasar demasiado el primer parto. Si por el contrario, tiene baja fertilidad en las vaquillas (tasa de concepción menor al 50%), debe corregir primero los problemas de manejo, antes de pensar en la utilización del semen sexado, de lo contrario ahondará aún más el problema”. Scheidegger apunta que en Uruguay el semen sexado se usaba desde antes que comenzaran las exportaciones y resulta difícil determinar si su uso aumentó con posteridad. “Hay que tener presente que el semen sexado se usa principalmente en vaquillas, por lo tanto su impacto se ve reducido a un porcentaje del rebaño y debemos esperar cerca de tres años (gestación + crianza) para ver el resultado”. Felipe Arias comparte la apreciación de Luco y Scheidegger, y agrega que “un beneficio adicional del sexado es la disminución de los mortinatos, por lo que se podría tener aproximadamente un 1 o 2% más de terneras vivas”. Por último, Scheidegger subraya que la oferta de toros sexados es mucho menor al semen convencional, por lo cual hay que ser cuidadoso en la selección y tener la precaución de fijarse en el grado de consanguinidad que tienen estos toros respecto a las vaquillas con las cuales se cruzarán. empresa lechera. “Cuando un productor no tiene buena información técnica de su lechería y no sabe cuáles son sus costos de producción o cuánto es el margen del litro de leche producido o de las hectáreas utilizadas, es poco probable que sepa los costos, márgenes y consecuencias asociadas a esta decisión en particular”. Si bien en este caso es poco probable que alguien no venda sobre su costo -agrega- se deben tener en cuenta todos los elementos involucrados. “Para esto necesitamos que exista información, sin ella no es posible gestionar adecuadamente el negocio”, sentencia el académico. Respecto al valor genético del rebaño nacional y los valores que están pagando los chinos por las vaquillas chilenas, el asesor considera que esta arista debe ser analizada bajo el “ ” 3 6 d l e c h e . 2 0 1 5 Aún no existe claridad respecto de lo que está haciendo China. Habrá que esperar el ciclo completo del negocio de modo que se conozcan los pormenores, y solo entonces podremos saber si fue un buen negocio para los productores. Javier Burchard prisma exclusivo del mercado. “Aunque nos cueste aceptarlo, nuestra genética lechera y cualquier genética, vale solo el monto que fijan los compradores y que es aceptado por los vendedores”. Esto está fuertemente afectado por las expectativas del negocio, explica el ejecutivo. Vale decir, si el negocio lechero se ve bueno y estable, se generan expectativas e interés por crecer o eventualmente por ingresar a él, habiendo más productores dispuestos a pagar mejores precios por las vaquillas, valorizándose la genética lechera. “Si por el contrario, el negocio lechero se deteriora, ocurre la situación inversa”, puntualiza. Uno de los factores que guía fuertemente las expectativas de los productores sin duda es el precio de la leche, pero ahora se ha introducido una nueva variable, la cual no estaba contemplada en la ecuación tradicional de este negocio, reflexiona Vidal. “La exportación disparó los precios internos y ahora nuestra genética vale más porque alguien la quiere, está dispuesto a pagar y hay productores abiertos a vender bajo esas condiciones”. Finalmente, Ricardo Vidal cree que el impacto de estas exportaciones en el inventario ganadero nacional “será más o menos relevante en función de los precios de las vaquillas, el número de empresas comprando, el tiempo que duren estas compras y el escenario de precios de la leche”. Sin duda todavía queda mucho paño que cortar en este tema, y solo el tiempo nos entregará una visión más acabada y concluyente sobre su real impacto y consecuencias en la actividad lechera nacional. Por ahora nos quedamos con las apreciaciones de los especialistas consultados, quienes sin duda aportaron importantes señales sobre las proyecciones del proceso exportador. El doctor Scheidegger, por ejemplo, no pasa por alto el impacto sobre el status sanitario que hacen notar los uruguayos. Para muchos resulta un absurdo sacar del país los animales sanos, cuando al mismo tiempo el Estado y los mismos productores realizan grandes esfuerzos por erradicar enfermedades que tantas pérdidas provocan al país lechero. Sin duda se debe estar alerta sobre este punto, que puede ser el talón de Aquiles del proceso exportador. Por otra parte, un aspecto que no ha sido considerado son los “días abiertos” que genera la avalancha de inseminación con semen sexado (ver recuadro). Los especialistas deben advertir a sus clientes sobre el enorme costo que significa un celo perdido. Estas pérdidas silenciosas hay que restarlas al valor de las vaquillas exportadas. Otra arista interesante, es que en el negocio exportador no tienen cabida las vaquillas híbridas, provenientes de excelentes lecherías que apostaron por el cruzamiento. Son estas las situaciones donde el mercado sorprende y deja al descubierto realidades experimentales que nuestro pequeño país acostumbra a sobrellevar. Por último, de las palabras de Javier Burchard se desprende que el valor de una vaquilla de alta genética lechera no se puede comparar con el precio de una vaquilla rematada en feria. Y sobre esto –a pesar de lo que diga el “decano de la prensa”– no debería haber mayor discusión. Por lo tanto, el análisis debiera realizarse desde una perspectiva exportadora en serio, no homologable con las condiciones que plantea el mercado interno y en un rubro diferente a la genética lechera. En tal sentido, nos atrevemos a sugerir a los especialistas, que realicen un ejercicio de cálculo económico donde se considere el valor de la genética, del mismo modo como se realiza “ ” Contra la decisión de ‘vender sin evaluar’ de algunos, a otros los instará a volcar su mirada hacia la crianza-recría, incorporando este negocio como un elemento adicional que le otorga sustentabilidad a sus sistema lecheros. Ricardo Vidal en otros negocios pecuarios. Las pollitas ponedoras de alta genética, tienen un valor en base a su capacidad de postura. Quien compra esas pollitas de un día de vida, está comprando un potencial productivo, no su carne. Esperamos que las opiniones vertidas en estas páginas sean de valor para nuestros lectores y sirvan de orientación al momento de tomar decisiones, donde deben tenerse a la vista todas las variables que integran la alambicada ecuación exportadora. * Valor del dólar $620, 14 de enero de 2015. 3 7 G EN É TIC A Por Einar Vargas Bello Pérez M. Veterinario, MSc, PhD Ciencias Animales PUC [email protected] La Genética y su relación con el Pastoreo Decisiones cruciales Si se suplementa racionalmente a vacas en pastoreo, éstas pueden alcanzar rendimientos similares a los de un animal en confinamiento. El éxito de cualquier sistema pastoril recae en factores genéticos. E La selección genética que se ha llevado a cabo en la raza Holstein para aumentar su potencial productivo, ha comprometido sus parámetros reproductivos. 3 8 d l e c h e . 2 0 1 5 l objetivo del pastoreo es brindarle a la vaca materia seca para favorecer la producción de leche. Teniendo en cuenta esta premisa, estos sistemas pueden estar basados solamente en pastoreo o con suplemento de una ración totalmente mezclada, sin embargo el éxito de ambos recae en factores genéticos que le permiten al animal tener una buena eficiencia alimenticia, desempeño reproductivo, longevidad, conformación de ubre y patas deseables, y habilidad para poder adaptarse a diferentes terrenos. Existen características genéticas que nos permiten una buena selección de animales que serán destinados a producir bajo sistemas en pastoreo: rasgos con énfasis en la fertilidad, producción y composición de leche. Por ejemplo, razas o líneas de animales que normalmente producen altos rendimientos de proteína y grasa son seleccionadas en sistemas donde se bonifican los sólidos totales o sistemas dedicados a la elaboración de quesos. Otro ejemplo es el trabajar con Holstein con alto porcentaje de genética de América del Norte, que normalmente responde bien en pastoreo, siempre y cuando exista una suplementación con concentrados o con una ración totalmente mezclada. Si se escogiera la mezcla entre razas, éstas podrían ser muy exitosas en determinados sistemas de pastoreo donde se busca satisfacer mercados de nicho con la ventaja de la heterosis. donde se alimentan los animales con raciones totalmente mezcladas. Sin embargo, Freeden et al. (2002), reportó que vacas Holstein canadienses de alta producción bajo un sistema en pastoreo intensivo tuvieron una producción de leche acumulada en 2 años similar a la de sistemas en confinamiento (vacas Holstein alimentadas con raciones totalmente mezcladas). Prácticamente estos resultados son una función en base a la composición de la dieta de los animales. Lo cierto es que si se suplementa racionalmente a vacas en pastoreo, éstas pueden alcanzar rendimientos similares a los de un animal en confinamiento. Estos resultados pueden ser más probables cuando se tienen animales que genéticamente están “diseñados” para producir bajo un régimen de confinamiento-intensivo. REPRODUCCIÓN EN SISTEMAS PASTORILES Suplementación con concentrados La decisión de suplementar con concentrados o con raciones mezcladas prácticamente es personal y puede depender de diferentes factores como: el tipo de infraestructura con que se cuente para realizar este manejo, crecimiento de pastos, estacionalidad, costo de los concentrados y quizás costos de cosecha y almacenamiento de forrajes (especialmente ensilados). La finalidad de suplementar es mantener la producción de leche en forma uniforme a través del año y al mismo tiempo llegar a aprovechar el potencial genético de los animales. En este sentido, el limitar el consumo de materia seca compromete negativamente la producción de leche. En 2003, Bargo y colaboradores reportaron que en sistemas en pastoreo la producción de leche se relaciona linealmente con la cantidad de concentrado ofrecido al ganado, estos incrementos pueden ir de 1,2 a 10 kg de materia seca/ día, con una respuesta de 1 kg de leche por cada kilo de concentrado aportado. Sin embargo, se estima que el pastoreo se reduce en 12 minutos por día, por lo tanto grandes cantidades de suplemento con concentrado puede resultar en un rendimiento lechero menos eficiente en sistemas en pastoreo y además esta situación podría, en algunos casos, afectar la salud del rumen y provocar acidosis. En Norteamérica e incluso en Chile, normalmente la producción de leche por vaca es más baja en sistemas pastoriles comparado con sistemas en confinamiento La selección genética que se ha llevado a cabo en la raza Holstein con el fin de aumentar su potencial productivo ha sido muy eficiente, pero al mismo tiempo ha comprometido sus parámetros reproductivos. La prioridad por producir más leche ha tenido consecuencias negativas sobre intervalos entre partos, tasa de preñez, En sistemas a pastoreo la producción de leche se relaciona linealmente con la cantidad de concentrado ofrecido al ganado. días al primer servicio, y tasa de concepción al primer ser vicio. Norman et al. (20 06) señalaron que en un periodo de 40 años, los días abiertos de vacas Holstein en Norteamérica aumentaron 37 días, sobre todo la segunda mitad de los años ’80 y a finales de los años ‘90. Quizás los problemas reproductivos que presentan las vacas seleccionadas para producir más leche podrían ser explicados por adaptaciones fisiológicas que sufre el animal para producir más leche derivando energía para ello y dejando de lado los aspectos de fertilidad. Es por esto que un buen manejo en nuestro sistema de producción podría ayudar a mejorar la fertilidad del rebaño aun cuando sean animales con mérito genético direccionado a producir más leche. 3 9 G EN É TIC A La primera generación tiene todos los atributos del vigor híbrido. La cruza entre razas puede promover resultados interesantes tanto para el aumento de rendimiento lechero como en la longevidad que el animal tiene dentro del rebaño. cuadro 1, se pueden observar con mayor detalle algunos parámetros de razas puras y ejemplo de dos cruzas, una de Holstein Friesian × Montbeliarde y otra de Holstein Friesian × Normanda. Cuadro 1. Desempeño productivo de ganado lechero en partos primaverales en sistemas en pastoreo en Irlanda. Cruzas entre líneas genéticas de Holstein Si el productor decide realizar cruzamientos entre diferentes líneas genéticas y en la cuales se involucre la incorporación de genética Holstein de alto mérito en un sistema en pastoreo, se debe considerar que si bien la producción de leche podría aumentar (siempre y cuando exista algún tipo de suplementación que permita mantener la condición corporal), la eficiencia reproductiva podría disminuir. En Chile el cruzamiento entre líneas genéticas de Holstein ha permitido mejorar el rendimiento lechero y los rendimientos de proteína y grasa. Edad al primer parto, duración de la gestación, intervalos entre partos así como precocidad y eficiencia reproductiva son factores muy importantes a considerar cuando se trabaja en sistemas estacionales desde el punto de vista de manejo reproductivo. 4 0 d l e c h e . 2 0 1 5 Razas y líneas genéticas Cruzas entre razas La cruza entre razas puede promover resultados interesantes tanto para el aumento de rendimiento lechero como en la longevidad que el animal tiene dentro del rebaño. En el Implicancias • En realidad, sería difícil poder establecer las ventajas que se puedan producir mediante los diferentes cruzamientos posibles entre razas o líneas genéticas, sin embargo existen numerosos estudios que podrían orientarnos para Genotipo Información genética de un animal Fenotipo Rasgos físicos que se pueden observar en el animal la elección de la mejor genética que pueda responder a la necesidades muy puntuales que tenemos en nuestros predios. • Es muy recomendable guardar registros tanto de la producción como de la situación financiera del predio. Estos registros permiten la clara evaluación del potencial genético que tiene nuestro ganado, no solo desde el punto de vista del genotipo sino también del fenotipo. • Resulta necesario el acceso a herramientas tecnológicas que puedan ofrecer una forma más precisa para poder seleccionar a los animales desde el punto de vista genético. 4 1 CALIDAD DE LECHE Por María Isabel Muñoz Account Manager IX Región Reporte de casos reales de la IX Región Trabajo en equipo y Servicio Ecolab logran notables resultados en planteles lecheros de la Araucanía. Fundo Arquenco RCS: 250.000 cél/ml Recuento bacteriano: 4.000 ufc/ml Su propietario, Alan Cooper, nos comenta que el fundo fue adquirido en 1893, cuando su bisabuelo Thomas Mackay llegó a la IX Región. “Luego pasó a manos de mi abuelo Wilfred Cooper, quien inició el sueño de tener una lechería que hoy lleva 80 años. Actualmente la administra mi hijo Max Cooper con muchas proyecciones y nuevos desafíos”. El campo también posee una quesería, “Arquenco y Cooper”, que produce un queso mantecoso y fresco muy apetecido en el mercado, y que en un futuro próximo ampliará sus variedades a Edam, Parmesano y Gruyere. Arquenco posee un rebaño estabulado permanente de 360 vacas en ordeña de raza Holstein Americano, con un promedio de 27 litros por vaca/día. Respecto a la calidad de leche, el recuento de células somáticas es de 250.000 cél/ml, mientras que el recuento bacteriano promedio es de 4.000 ufc/ml. La alimentación es en base a bolos de alfalfa y ensilaje de maíz. La proyección en el corto plazo, es llegar a un promedio/vaca de 30 litros, para lo cual se necesita mucho esfuerzo y trabajo en equipo. Actualmente trabajan 14 personas en el área de lechería y 12 personas en la quesería, donde don Nelson Segura (jefe de campo) y Carlos Melo (encargado del cultivo de papas) ayudan en el progreso constante del predio. Con respecto al apoyo externo, se destacan los 4 años que llevan trabajando con Ecolab, logrando conformar un buen equipo tanto en la lechería como en la quesería, con muy buenos resultados en Calidad de Leche e Higiene, gracias al apoyo brindado y por supuesto a la buena gestión. Agropecuaria Georgina RCS: 180.000 cél/ml Recuento bacteriano: 3.000 ufc/ml El propietario es don Max Schalchli, pero quien administra el campo desde hace 2 años es su hijo, Matías. Poseen 320 vacas en ordeña y una producción de 7.700 litros por lactancia, con un crecimiento de 30% logrado en los últimos años. La calidad de leche es excelente, con un recuento bacteriano de 2.000 a 3.000 ufc/ml y un recuento de células somáticas de 180.000 a 200.000 cél/ml. La alimentación se basa en pastoreo de ballica festulolium, concentrado y ensilaje de maíz en invierno, con 2 ordeñas diarias y con una concentración de partos del 60% en primavera y 40% en otoño. La raza es Red Holstein dado que realizan la engorda de los machos. Además cuentan con 50 hectáreas de avellano europeo. “Somos uno de los pocos predios lecheros de la zona de Boroa”, comenta Matías. “Este predio fue adquirido por mi padre y ha pertenecido a la familia por más de 50 años, de lo cual nos sentimos muy orgullosos. Así como también de 4 2 d l e c h e . 2 0 1 4 Alfonso Ancali, Alex Fonseca, Matías Schalchli, Ricardo Fonseca e Isabel Muñoz (Ecolab). nuestros avances y esfuerzos, con tan buenos resultados. Hemos enfrentado varios problemas a lo largo de nuestra historia, pero finalmente, en conjunto con nuestros asesores, Thomas Schwarz (veterinario del predio) y Ecolab, nos hemos potenciado y consolidado como un equipo de trabajo muy bueno”. “Ecolab nos ha apoyado mucho en estos 5 años que llevamos trabajando juntos, lo que nos ha permitido mejorar bastante tecnológicamente, incorporando el sistema alimentador automático y las Pezoneras Triangulares Ventiladas Impulse®, entre otros. Esto, sumado a logros importantes en calidad de leche y el haber alcanzado los niveles de crecimiento esperados, sin duda nos da mucha satisfacción”, concluye. Fundo Calatayud RCS: 180.000 cél/ml Recuento bacteriano: 3.000 ufc/ml Su propietaria, la señora Carmen Sáenz Terpelle, comenta con gran orgullo y emoción que se trata de un predio con mucha historia, con más de 100 años en el rubro lechero. Consta de 600 hectáreas y 434 vacas en leche, con un promedio de 25 litros por vaca, y muy buenos resultados en calidad de leche: 3.000 ufc/ml en Recuento Bacteriano y 180.000 cél/ml en RCS. El sistema de alimentación se basa en praderas, ensilaje y cultivos suplementarios. El progreso del predio ha sido sostenido, comenta la administradora Maribel Riquelme Ruiz, quien desde que tomó las riendas del campo ha logrado mejorar tanto la calidad de leche como la producción, con mucho compromiso y esfuerzo cada día, y de la mano del Isabel Muñoz (Ecolab), Carmen Sáenz (propietaria), Maribel Riquelme (administradora) y José González (jefe de lechería). servicio profesional de Ecolab y asesores del predio, como César Hernández, quienes periódicamente realizan sus visitas y controles para mantener los buenos resultados. Maribel agrega que Ecolab los ha ayudado mucho a bajar costos en medicamentos y a evitar problemas de mastitis que antiguamente eran comunes. “El logro de estos resultados es gracias al trabajo en equipo del personal del predio, que lleva muchos años con nosotros, y la asesoría de personas externas como el equipo Ecolab durante estos 4 años”. P U NTOS DE V IST A / INNO V A CI ó N Por Héctor Echeverría V. Director Ejecutivo FIA Innovación en la Industria Alimentaria El momento del Marketing C Uno de los desafíos es ofrecer alternativas atractivas para lograr destacar entre la gran cantidad de productos que están a disposición en el mercado. 4 4 d l e c h e . 2 0 1 5 uando observamos la áreas en las cuales estamos innovando en el sector agroalimentario, empiezan a tomar fuerza aquellos temas asociados al marketing y la comercialización, lo cual implica la integración de nuevos sectores del conocimiento y la conformación de nuevas redes en torno a la industria agroalimentaria. Esta tendencia no solo se observa en nuestro país, sino tambien en otras economías donde la innovación no tecnológica es cada vez más relevante. Nos referimos al marketing alimentario, entendido como una línea de especialización del marketing moderno y como una herramienta al alcance de todas las empresas o instituciones, independiente de su tamaño o naturaleza. Una de sus definiciones y desde la cual nos queremos aproximar al apoyo de las empresas, es el marketing agroalimentario como “un sistema integral de actividades que incluyen un conjunto de procesos mediante los cuales se identifican las necesidades y deseos de los consumidores, para luego satisfacerlos en forma creativa e innovadora y promover el intercambio de productos y servicios de valor con los clientes y lograr una utilidad o beneficio para la empresa u organización y establecer una diferenciación respecto de los competidores”. Para ello es necesario conocer en profundidad el mercado o nicho de consumidores que la empresa quiere satisfacer, y a partir de ella construir una estrategia de producción de alimentos utilizando las distintas herramientas del marketing en forma creativa e innovadora: precio, promoción, plaza y producto. Hoy, uno de los desafíos a los cuales se enfrenta la industria alimentaria es encontrar respuestas atractivas ante la cantidad y diversidad de productos que surgen y están a disposición en el mercado, para atraer la atención y fidelizar a los consumidores. En un escenario altamente competitivo y donde el consumidor está más informado y por ende más exigente, el gran desafío para las empresas alimentarias es identificar cuáles serán los elementos que permitirán la diferenciación ante la competencia. En este ámbito, se deben seleccionar y comunicar los atributos, cualidades, características, nuevos usos, garantía y servicios adicionales, y ello transmitirlo a los consumidores a través de su calidad, su forma de presentación, los materiales y procesos utilizados en su producción y en sus envases, los mecanismos de comercialización, entre otros aspectos, que den sentido y coherencia al producto que se ofrece respecto del relato que lo acompaña. Para elaborar una estrategia de marketing efectiva es necesario conocer en profundidad el mercado o nicho de consumidores que la empresa quiere satisfacer. Asimismo se debe construir un sistema de trazabilidad que garantice el seguimiento y control de la elaboración y calidad del producto. Es necesario también que se establezca una cultura de la innovación que permita ir a la vanguardia en las tecnologías de procesos eficientes, descubriendo nuevas propiedades de los productos y mejorando su presentación. Otro punto importante es definir un relato, ¿Qué queremos comunicar?, ¿Cómo queremos que nos vean?, para atraer la atención e informar al consumidor, mostrando el origen, el territorio, la cultura, los procesos de elaboración, la individualización del que lo produce. El marketing alimentario debe permitir a las empresas lograr la confianza, fidelización y cercanía de los productos con las personas y satisfacer sus necesidades, gustos, deseos y estilos de vida. La idea es reforzar la imagen de marca, posicionar el producto y generar mayor rentabilidad teniendo conciencia que el entorno ha cambiado y es fundamental abrirse y participar con otros. 4 5 Por Enzo Capurro, PhD. Prevenzia Konsult Ltda. Confort Animal Línea de productos de GEA Farm Technologies Mastitis Capsule GEA Farm Technologies ofrece una amplia gama de productos para el área Equipamiento de Galpones. Son accesorios funcionales que se ajustan a las necesidades del animal y ayudan a mantener un ambiente limpio. Confort paras vacas echadas Para que las vacas estén tan cómodas como en la pradera, ofrecemos diferentes tipos de camas según las necesidades individuales. Se pueden ocupar en sistemas de estabulación libre o confinada. Las camas diseñadas por GEA están pensadas en función del comportamiento natural de la vaca. La combinación única de materiales hace que la cubierta y la espuma de nuestras camas sean cómodas, resistentes, elásticas y durables. Pisos de goma Revelando con Bioeconomía los Costos ocultos de la mastitis E studios internacionales muestran que en promedio el 73% de los empresarios lecheros subestiman las pérdidas por mastitis (Huijps et al., 2008). Los gastos netos combinados anuales de una infección intramamaria para un rebaño de 100 vacas en Alemania fue de €22.000 (aprox. 21 millones de pesos chilenos). El reemplazo por mastitis significó un 20,7% de este total (Halasa et al., 2009). A nivel mundial, estimaciones publicadas de las pérdidas económicas por mastitis clínica se mueven entre $22.000 a $150.000 chilenos con tremendas fluctuaciones entre rebaños (Hogeveen et al., 2011). De éstas, $67.000 son atribuidos a la baja de producción, $8.200 a incremento de la mortalidad, y $30.000 a costos de tratamientos y sus asociados (Bar et al., 2007). Para que sus vacas se desplacen con agilidad y sin dolor, nuestros pisos están fabricados de un caucho que absorbe los impactos, mejorando el confort. Además, no absorben líquidos y son adecuados para todos los sistemas de limpieza. De esta manera no facilitan el desarrollo de las bacterias y mejoran los niveles de higiene. La superficie antideslizante de nuestros pisos es tecnología para el confort, porque entrega seguridad al ganado. Los pisos se pueden aplicar en salas de ordeña, pasillos, patios de espera, patios de alimentación y echaderos. Su instalación es sencilla y rápida. Comederos & bebederos Contamos con un amplio catálogo de comederos y bebederos, que permiten ofrecer el agua de bebida y alimentos limpios y frescos a sus animales. Además son de fácil manejo y simples de limpiar. El ambiente en el galpón Tanta luz y tanto aire como usted quiera. Para un ambiente sano, ofrecemos ventiladores, cortinas, regulación de luz, aspersión, sistemas de ventilación y climatización de ambientes automatizados. Cepillos para vacas Cuando las vacas están más limpias, los niveles de higiene mejoran sustancialmente. Además, el uso de los cepillos aumenta el confort en el animal y disminuye el stress. Nuestros distribuidores lo asesorarán con todo gusto. 4 6 d l e c h e . 2 0 1 5 V ID A C U L T U R A L Jorge Ball, músico y luthier El último refugio del maestro El afamado músico venezolano ha dedicado su vida a difundir la cultura latinoamericana por el mundo. Hoy, afincado en Osorno, lucha por mantener su país natal. “Eso en lo formal, porque la verdad es que yo estuve vinculado a la música desde muy pequeño. Ya a los 14 componía, además de fabricar mis propios instrumentos de viento, como quenas, tarkas y zampoñas”. Difusor inquieto e innovador, a poco de egresar del Conservatorio fundó la afamada Orquesta Sinfónica Simón Bolívar, y luego fue fundador y director musical de diversas agrupaciones nacidas al alero de la Universidad Central de Venezuela. Después de recorrer Latinoamérica y empaparse de la diversidad de su arte y su cultura, Ball viajó a París, donde estudió música en instituciones de gran prestigio, como la Schola Cantorum, el Institut Catholique y el Laboratoire d´acustique de la Universidad París-Descartes. Trotamundos empedernido, siguió su periplo en Italia, donde su vida artística tomaría caminos insospechados. vivo el maravilloso arte de la luthería. L os ágiles dedos zurdos brincan con precisión quirúrgica sobre los trastes del cuatro, mientras los diestros, que en el pasado dibujaron sus formas y labraron su delicada curvatura, rasguean furiosos sobre la boca del pequeño instrumento. Los acordes del joropo inundan un local casi en penumbra, permitiendo ver apenas los rostros de un público que, a pesar del frenesí del ritmo caribeño, no atina a mover un solo músculo y contempla extasiado la soberbia ejecución del músico venezolano Jorge Ball. Multi-instrumentista, profesor, ex integrante de Inti-Illimani, promotor y gestor cultural, Jorge Ball, radicado en Osorno desde hace tres años, es quizás el más excelso luthier que existe actualmente en Chile y, sin lugar a dudas, uno de los más destacados de América Latina. Ball ha recorrido el mundo difundiendo la música latinoamericana, cautivando audiencias de todas las latitudes con su cuatro inseparable, ese pequeño instrumento de cuerdas de sonido sobrio y melancólico. Caraqueño americano, como Bolívar, así se define quien se echara a andar por el continente cuando apenas era un adolescente. “Mientras la mayoría de mis amigos miraban hacia Estados Unidos o Europa, yo siempre miré hacia América Latina”, dice Jorge Ball, que iniciara su formación musical en el Conservatorio Juan José Landaeta de 4 8 d l e c h e . 2 0 1 5 Cansado de tanto andar por el mundo, Jorge valora la tranquilidad que le ofrece una ciudad como Osorno para hacer su música y desarrollar su oficio de artesano medieval. Ingresó a la Escuela de Luthería de Cremona –cuna de Stradivarius y máximo referente mundial en la materia– enfocándose en la construcción y restauración de instrumentos de cuerda latinoamericanos, como cuatros, tiples y charangos. Y, en 1982, se reencontró con Inti-Illimani, cuando los integrantes de la afamada agrupación chilena se encontraban exiliados en Italia, y a quienes había conocido una década antes en Venezuela. Al poco andar fue invitado a integrar la banda, que dejó dos años después, volviendo entre 1998 y 2000, y posteriormente en 2004. Durante su permanencia en los Inti, Ball aportó no solo con su talento de ejecutante multiinstrumentista, sino que además fue determinante en la incorporación de nuevos ritmos musicales al reportorio del grupo. A partir de entonces, Jorge Ball ha fundado y dirigido diversas escuelas de luthería, tanto en Venezuela como en Chile. Sin embargo no todo ha sido alegrías para este embajador de la cultura latinoamericana. La mayoría de los instrumentos "Ball" son adquiridos por músicos extranjeros. EL RENACER DEL LUTHIER En su incombustible afán de difusión cultural, Jorge Ball se ha propuesto entregar sus conocimientos y experiencia como músico y luthier impulsando diversos proyectos e iniciativas, las cuales no siempre han contado con el respaldo esperado. Ball es un convencido de que la cultura es el verdadero motor que mueve a los pueblos, “la sangre que fluye a través de múltiples manifestaciones 4 9 V ID A C U L T U R A L P U NTOS DE V IST A / CO L M E V ET Por Eduardo Álvarez Peralta Presidente Nacional Colegio Médico Veterinario Junto a uno de sus alumnos aventajados. y que nos otorga nuestra identidad latinoamericana, y como tal debe ser relevada y valorada por la sociedad en su conjunto”, afirma. Largas temporadas con Inti Illimani, con giras maratónicas por Chile y el mundo, mantuvo a Jorge alejado por un buen tiempo de su gran pasión: la luthería. Y fue Osorno el lugar donde retomó el arte que funde el trabajo con la madera y la búsqueda de sonoridades musicales. Después de ejercer durante seis años como académico en la UMCE de Santiago, y dejar definitivamente al Inti, el 2011 se radicó en la ciudad sureña, donde fundó la “Escuela de Luthería Jorge Ball”. No ha sido fácil mantenerla, reconoce. “Prácticamente no hemos recibido apoyo de ningún tipo, situación que a veces nos desmoraliza un poco, ¡pero seguimos adelante!”, comenta con ese entusiasmo desbordante que exhiben los venezolanos. “Aquí lo que hace falta es crear conciencia cultural, pero de verdad, conciencia latinoamericana, que poco a poco permita aminorar las cargas de la pobreza que arrastra por siglos este continente maravilloso”. A pesar de las dificultades, la escuela de Ball ha formado a decenas de jóvenes de Osorno, Puerto Varas, Puerto Montt, La Unión, Valdivia, etc., a quienes Jorge les 5 0 d l e c h e . 2 0 1 5 inculca el amor por sus raíces latinoamericanas. “Por eso hacemos cuatros, tiples y charangos, y no violines, violas o cellos. Eso sería eurocentrismo puro”, comenta. Ball, que ha vivido en Francia, Italia, España y Alemania, se apura en aclarar que su arte está enraizado profundamente en América Latina. “Yo no quiero ser europeo, no pertenezco a ese mundo. Somos un continente riquísimo en todos los aspectos, y nuestra deuda es precisamente reconocernos en nuestra diversidad y en aquellos elementos culturales que nos hermanan”. En cualquier lugar del continente, Jorge Ball afirma sentirse en su hogar, en la Patria Grande de América Latina. “Soy un forastero, pero jamás un extranjero”, dice haciendo la distinción con una palabra que siente cálida y que refiere a una cuestión puramente geográfica y no emocional. Arte milenario, en la luthería se utilizan árboles de más de cien años, explica Jorge, “desde medio metro de la raíz hasta donde comienzan a crecer las ramas, dado que aquella madera ofrece la conducción óptima de sonido”. Y fiel a sus principios, para sus creaciones hoy está utilizando maderas, en lo posible, autóctonas del continente. “Son materiales únicos, que dan la posibilidad de elaborar instrumentos del más alto nivel, con sonoridades bellísimas, únicas”. Cansado de tanto andar por el mundo, Jorge valora la tranquilidad que le ofrece una ciudad como Osorno, para hacer su música (integra un grupo de cuerdas, Jorge Ball cuarteto) y desarrollar su apasionante oficio de artesano medieval. “No quiero guardarme este conocimiento, sería mezquino de mi parte. Hoy, después de más de 30 años de trayectoria, mi deseo es dedicarme casi en un cien por ciento a la luthería y enseñar a los jóvenes este arte tan maravilloso”. Así como el gran Antonio Stradivarius fabricara sus mejores violines a partir de los 50 años de edad, Jorge Ball dice estar comenzando a vivir su propia época dorada como luthier, con la apacible y a veces apática Osorno como telón de fondo. Colegio Médico Veterinario de Chile 60 años C on la entrada en vigencia de la Constitución de 1980, mediante el DL Nº 3163 de 1981, los colegios profesionales pasaron a convertirse en asociaciones gremiales, rigiéndose por otro DL -el Nº 2757- que establece que “no puede ser requisito para el ejercicio de una profesión u oficio el estar afiliado o pertenecer a un colegio profesional” y que no corresponde a los colegios resolver conflictos entre profesionales ni dictar aranceles u honorarios. Consecutivamente, la Reforma Constitucional del año 2005 otorgó a los colegios profesionales la tuición ética sobre sus miembros, pero no restauró la colegiatura obligatoria. Luego, en junio de 2009 el Ejecutivo envió al Congreso Nacional un proyecto de ley sobre colegios profesionales, el que a la fecha aún no ha sido materia de discusión por el Poder Legislativo, y en el cual tampoco se restablecen las prerrogativas que tenían los colegios profesionales antes de 1980. Bajo la presidencia de Carlos Ibáñez del Campo -y siendo ministro de Agricultura el ingeniero agrónomo José Suárez Fanjul- el 16 de septiembre de 1955 se promulgó la Ley Nº 11.901, mediante la cual se creó el Colegio Médico Veterinario de Chile. Dicha Ley entró en vigencia el 7 de octubre del mismo año, razón por la cual es en esa fecha que se celebra el aniversario de la creación de nuestro Colegio, que este año cumple 60 años. Pocos días después se constituyó el Comité Organizador del Colegio, presidido por el doctor Hugo Konrad Sievers, decano de Medicina Veterinaria y vicerrector de la Universidad de Chile, el cual estuvo integrado por el director del Servicio Nacional de Salud, doctor Guillermo Valenzuela y por el doctor Mario Cornejo, director de Ganadería y Sanidad Animal del Ministerio de Agricultura. El primer Consejo Nacional del Colegio Médico Veterinario de Chile fue presidido por el doctor Zacarías Gómez Marzheimer, conformándose ese año (1956) consejos provinciales en Santiago, Valparaíso, Concepción, Cautín, Valdivia y Osorno. En la actualidad, el Colegio Médico Veterinario cuenta con consejos regionales en la Región Metropolitana, Ñuble, BíoBío, Valdivia, Osorno y Llanquihue, contando con casi 4.000 profesionales registrados. Sus estatutos señalan entre sus objetivos el “promover el perfeccionamiento profesional, ético y científico de sus miembros, velar por el desarrollo de las ciencias médico veterinarias y por el prestigio y prerrogativas de la profesión de médicos veterinarios, mantener la disciplina entre sus asociados, prestar protección y otorgar servicios a estos y velar por el prestigio y dignificación de la profesión, procurando el reconocimiento social de la misma”. El Consejo Nacional del COLMEVET aprobó adherirse formalmente a la Federación de Colegios Profesionales de Chile, entidad que solo desde fines de 2014 cuenta con personería jurídica y, a través de ella, promover decididamente la colegiatura obligatoria para el ejercicio profesional. Indudablemente, a la gran mayoría de los colegios profesionales, incluido el nuestro, las normativas legales vigentes con posterioridad a 1981 los han impactado profundamente en lo que dice relación con fortalecer la colaboración entre profesionales, dignificar la profesión y “poner atajo al ejercicio de personas incompetentes”, rol que en el pasado habían desempeñado con extremado celo y eficiencia. Recuperar esa condición constituye un desafío prioritario para quienes actualmente forman parte –voluntariamente– de nuestro Colegio, y para aquellos que lo conformen en el futuro. Sin embargo, hay también otros aspectos de la mayor trascendencia, en los cuales creemos que es fundamental intervenir y participar efectivamente, como lo son la certificación de competencias laborales, la realización de estudios sobre oferta y demanda profesional acorde a las necesidades del país, la acreditación universal de todas las escuelas y programas de enseñanza, y la elaboración de políticas públicas y propuestas programáticas en el ámbito de sus competencias. Ello, en nuestra opinión, solo es viable si -como ocurre en la gran mayoría de los países desarrollados, a los que suele considerarse paradigmáticos- la colegiatura es obligatoria. El hacer realidad el logro de estos objetivos es una tarea de todos quienes, en virtud de sus méritos y esfuerzos, han obtenido el título de médicos veterinarios, a los cuales el Colegio los invita a sumarse. 5 1 A SOCI A TI V ID A D E INNO V A CIÓN Un gran desafío cumplido Exitosa inauguración de la “Ruta Leche Volcán” en la Región de Los Lagos. A bordo del coloso, previo al recorrido por el predio. A fines del año 2013, la sociedad “Los Volcanes del Sur” se propuso concretar un innovador proyecto turístico aprovechando el espectacular entorno natural en que se desarrolla la actividad lechera en esta zona. Trazando un fascinante recorrido entre las localidades de Puerto Octay y Cascadas, la sociedad dio vida a la denominada “Ruta Leche Volcán”, teniendo como principales atractivos la vista privilegiada de los volcanes Osorno y Calbuco, el imponente lago Llanquihue y los hermosos predios lecheros pertenecientes a los socios de “Volcanes”, quienes junto a sus familias ofician de anfitriones de la Ruta. Luego de un año de intenso trabajo, en diciembre de 2014 los propios socios de “Volcanes” validaron el recorrido, y solo semanas más tarde la empresa Boehringer Ingelheim realizó el primer tour oficial, inaugurando de esta manera la “Ruta Leche Volcán”. Esta primera experiencia se efectuó con un grupo de productores argentinos, entre los cuales se contaban los ganadores de la 16° edición del Premio Mamyzin a 5 2 d l e c h e . 2 0 1 5 la Excelencia en la Producción de Leche de Calidad, seleccionados por Boehringer entre más de 20 0 0 tambos participantes, y un grupo de fans de la raza Montbeliarde que vinieron a observar su desarrollo en Chile. Los tamberos trasandinos se mostraron gratamente sorprendidos, destacando los paisajes sobrecogedores y la excelencia con que se trabaja en los campos visitados. La Ruta Según explica la gerenta de “Volcanes”, Edith Geldres, la Ruta consiste en un Milk Day con un programa que considera puntos de parada en los cuales se mezclan tres grandes componentes. “El primer componente es el cultural, dado por la visita a Puerto Octay, con su arquitectura patrimonial y la descripción de la colonización alemana vinculada a la actividad lechera. El segundo es el componente técnico, ya que se explica cómo se produce leche en base a praderas, visitando algunos predios de los socios de Volcanes”. 5 3 A SOCI A TI V ID A D E INNO V A CIÓN Milk Break a orillas del lago Llanquihue, en el predio de la familia Menzel. Los socios de “Los Volcanes del Sur” durante el recorrido de validación de la Ruta. Los tamberos argentinos quedaron maravillados con la “Ruta Leche Volcán”. Productores trasandinos durante la observación del pastoreo en el campo de la familia Matzner. “Boutique Mágica” en el galpón de tres pisos de la familia Homad. Las esposas de los socios son las grandes anfitrionas de la Ruta. La Ruta está pensada para todo público, tanto productores de leche como cualquier turista que quiera conocer cómo se produce leche en el sur de Chile. Visita a la sala de ordeña de uno de los campos que integran la Ruta. Por último, el tercer componente -agrega Geldresestá dado por la “experiencia mágica”, propiciada por una serie de detalles pensados y preparados por las esposas de los socios, como la degustación de licor de leche y wafles con manjar, tan típicos de la zona, y la entrega de aromas del campo, entre otros. 5 4 d l e c h e . 2 0 1 5 La Ruta se inicia en Osorno, pasando por el sector industrial donde se emplaza la planta Nestlé, continúa con un recorrido histórico y patrimonial por Puerto Octay, para posteriormente visitar siete predios lecheros, donde en algunos se muestran las lecherías, en otros las praderas y el pastoreo y, en los últimos, durante la tarde, se observa el proceso de ordeña. “Durante el recorrido se entrega una reseña de cada predio, describiendo sus características técnico-productivas. La Ruta contempla además un almuerzo en un restaurant a orillas del Llanquihue, un milk break en otro punto del lago, para terminar con un exquisito maridaje de vino más quesos en el denominado Galpón Mágico”, comenta Geldres. Actualmente, la sociedad se encuentra promoviendo la Ruta tanto en Chile como en el extranjero, sumándose de esta manera al inigualable circuito turístico del sur de Chile. 5 5 R E L A TOS / CONT R O L DE P L A G A S La indómita Musca domestica C orría el año ‘81 cuando un inseminador me invitó a su recorrido habitual por los campos de la provincia de Cautín. A las 5 de mañana estaba con su renoleta nueva recogiéndome en mi domicilio. Eran mis primeras incursiones en La Araucanía y era fantástico pasear por lugares tan exuberantes de vegetación, todo lo verde era un lenguaje nuevo que había que aprender. Al poco tiempo ya sabía reconocer el nitrógeno expresado en la pradera o en los trigales, así como reconocer a la distancia el verde de los coigües, robles, pinos o eucaliptos. Arriba de esa renoleta me fui enriqueciendo con experiencias fundamentales que abrieron mi mirada a la sociología rural, a la botánica aplicada, al mundo forestal, al suelo, al agua, a la existencia de todo lo vivo y sus conexiones. Sin embargo, hubo de pasar varias décadas para conseguir una mirada integral y así lograr entender el conjunto, lo que los académicos llaman con elegancia “holístico”. Sin embargo, hay lecciones que son brutales y, como tal, son inolvidables. Así, casi al medio día llegamos por el camino de Huichahue a un sórdido fundo ganadero. Era retroceder al Medioevo, todo el ambiente era una denuncia a las malas prácticas. Cercos, praderas, galpones mostraban un descuidado deterioro que hablaba de una desidia crónica. En los corrales había un lote de vacas que esperaban su turno para ingresar a una sala maloliente donde un par de mozuelos las ordeñaban a mano. Se sentía el olor agrio de la leche descompuesta, donde las moscas en abundancia se deleitaban tiñendo todo el sombrío paisaje de gris. Nunca había sentido el zumbar de un mosquerío con tanta fuerza, al punto de experimentar cierto grado de amenaza, como cuando nos acercamos a un panal de abejas y ellas hacen sonar sus alas a modo de advertencia. Al fijar la mirada en las ubres de las vacas, se podían ver en muchas de ellas la pérdida de un cuarto, y desde varias supuraban heridas donde las moscas se peleaban a zumbidos un espacio para posar sus trompas succionadoras. Muchos de los mejores veterinarios habían pasado por el fundo, tratando de aplicar -sin éxito, claro- sus conocimientos en pos de mejorar las condiciones sanitarias. La dueña era una gorda desgreñada, de hablar vulgar que bordeaba las cinco décadas. Nos saludó en forma seca y nos invitó a recorrer otras dependencias de lo que ella llamaba lechería. Después de unas vueltas, llegamos a una bodega donde almacenaba los quesos, los que naturalmente estaban cubiertos por una capa de muscas. De su delantal sacó una cortaplumas, tomó un queso pequeño como de un kilo, le hizo un par de cortes y le dio a mi amigo un trozo para que probara. Yo la dejé con la mano estirada y le agradecí su gesto, pero mi estómago rechazaba la ingesta de cualquier alimento. Nada me hubiera echado a la boca sintiendo las pequeñas picaduras del mosquerío que se posaba en la cara, orejas, manos, brazos incluso en el cuero cabelludo. Afortunadamente nunca más vi algo semejante en ninguna lechería que he visitado, en Chile ni en el extranjero. Es evidente que para las personas que vivimos en este siglo, las moscas son criaturas asociadas a lo mórbido. Sin duda son insectos muy necesarios para el equilibrio de la naturaleza, porque sus larvas son capaces de transformar la materia orgánica en descomposición, como el guano, frutas, hierbas, animales muertos, con una eficiencia deslumbrante y, por otro lado, su misión también consiste en transmitir enfermedades para frenar el desarrollo de otros seres vivos y evitar la explosión demográfica. Y este punto es el que se opone a nuestros intereses humanos, porque no aceptamos que un insecto tan despreciable como una mosca atente contra nuestra salud, como tampoco que invada el ambiente de nuestros animales que son una fuente fundamental para la sobrevivencia de la vida humana sobre el planeta. Hace muchas décadas, diversos investigadores del mundo entero demostraron que las moscas son capaces de transmitir Su rápido y fértil proceso reproductivo asegura una población en constante crecimiento. 5 6 d l e c h e . 2 0 1 5 5 7 R E L A TOS / CONT R O L DE P L A G A S La miasis es frecuente en heridas de la piel, tanto del hombre como de los animales. al hombre más de 100 enfermedades, como el cólera, el tifus, la disentería, la salmonelosis, entre las más nombradas. En las lecherías las moscas actúan como vectores, lo que significa que son capaces de transportar en sus patas y pelos microorganismos como hongos, bacterias y virus, teniendo una participación importante en la transmisión de la queratoconjuntivitis, infección del ombligo, y diversas miasis (desarrollo de larvas) en heridas, como las producidas por la castración y corte de cachos y cola. También las bacterias que producen mastitis son transportadas por el aparato bucal de las moscas, al ir de pezón en pezón succionando restos de leche. Todos los estudios demuestran que el control de moscas es muy efectivo sobre la salud del rebaño. Se podría afirmar que en una lechería con menos moscas, hay menos presentación de todas las enfermedades que corrientemente conocemos. Estudios recientes le asignan al cambio climático un impacto favorable en el desarrollo de insectos en el mundo entero. La temperatura alta es un aspecto que beneficia y acelera el desarrollo de las larvas durante el proceso de metamorfosis, favoreciendo la población de estos insectos en los ambientes comunes donde se desarrolla la economía lechera. 5 8 d l e c h e . 2 0 1 5 El manejo de los riles y el control de moscas en esta enorme masa orgánica -sustrato ideal para el desarrollo de la mosca- es un foco que no se puede dejar de lado en el control del ciclo del insecto. Un efectivo plan de control debe necesariamente considerar la eliminación de los adultos, que son responsables de la postura de huevos y, por otro lado, destruir la fuente donde estos huevos se crían: la materia orgánica. Una lechería moderna debe parecerse a una clínica, y no por su estética y alegoría a la modernidad, sino porque la higiene, la limpieza y la buena iluminación favorecen un ambiente sano, que dificulta el desarrollo de microorganismos patógenos y la presencia de insectos que transmiten y transportan enfermedades de impacto comercial. Cuando el ser humano tuvo la genial ocurrencia de domesticar a los animales, de ahí en adelante se hizo responsable de todo lo que les sucede a ellos. Así, podemos generar el mejor ambiente artificial para que prosperen y muestren todo su potencial genético, o establecer un medio ambiente donde se favorezca el desarrollo de gérmenes que atenten contra su salud y su vida, con consecuencias comerciales desastrosas. De usted depende. www.feriasaraucania.cl 6 0 d l e c h e . 2 0 1 5 Información de Mercado Información de Mercado www.feriasaraucania.cl ENT R E V IST A S / G EN É TIC A TPI Novedades del cambio de la base genética En diciembre de 2014 la Asociación Holstein de Estados Unidos dio a conocer la nueva base de comparación de los toros de las razas lecheras norteamericanas. El especialista en genética Juan Vásquez, explica los alcances de este cambio. Juan Vásquez, médico veterinario especialista en genética bovina. 6 2 d l e c h e . 2 0 1 5 S i hay algo complicado de explicar y al mismo tiempo de comprender a la primera, es la genética. Por cuanto, todos los valores que acompañan la información de un toro son cifras compuestas por una gran cantidad de información estadística que están insertas en una fórmula, la que finalmente da un número, un valor que está conformado por diversas fracciones que representan todas las características que los genetistas de la Holstein Association USA han ido buscando. En diciembre de 2014, esta organización realizó lo que se llama “cambio de la base genética”, un término que para los especialistas resulta muy simple de comprender, sin embargo para la mayoría es un tema complejo. Para conocer los detalles y alcances de esta materia, DLeche conversó con el conocido médico veterinario Juan Vásquez, quien por largos años ha trabajado en el tema genético lechero. Vásquez explica que el cambio de base genética se realiza en Estados Unidos cada 5 años, con el objetivo de comparar los toros del presente con animales contemporáneos, y no con animales del siglo pasado, porque una comparación de esta naturaleza no tendría sentido. “En la actualidad, el avance de la información es tan poderoso que ni siquiera tiene sentido hacer comparaciones genéticas de animales actuales con otros de hace una década”, apunta. Al comparar los nuevos toros con sus pares de hace 5 años, el ejercicio es más veraz, señala el especialista. “Es decir, cuando hablamos de toros que mejoran 1.000 libras, estamos haciendo una comparación con lactancias de vacas que nacieron hace 5 años”. Cada vez que se realiza un ajuste de base -aclara Vásquez- a los toros actuales se les restan los valores de producción de leche, grasa y proteína, ya que se considera que estos valores corresponden al progreso genético de los 5 años anteriores. En consecuencia, ahora los valores se van a comparar con la información que arrojaron las vacas nacidas el año 2010. ENT R E V IST A S / G EN É TIC A Esto inevitablemente genera algún grado de confusión –reconoce el gerente de Imagro– “ya que durante cinco años nos acostumbramos a ciertos valores, que categorizamos en altos, medios y bajos. Así, un toro de 2.000 libras era un toro alto, otro de 1.000 era medio, y uno de 400 era bajo; esto para producción de leche. Esta clasificación durante un lustro nos resultó familiar y formó parte de nuestro lenguaje, fue el código común que utilizamos para dialogar sobre este tema. Pero ese código cumplió su ciclo, y ahora hay que incorporar y asimilar el nuevo”. El ajuste base para el 2015 es de aproximadamente 380 libras para producción de leche. Esto significa que aquel toro que durante 5 años fue considerado “bajo” con 400 libras, hoy cae a casi cero, o definitivamente puede tener un valor negativo; mientras que el de 1.000 libras pasa a ser “mediano”, y desaparecen los toros de 2.000 libras. Hoy se busca eficiencia económica, razón por la cual se valora la vaca que convierte mejor los alimentos en kilos de leche. “Ahora un toro alto bordeará las 1.400 o 1.500 libras, y el top quedó en 2.136, es decir, 646 libras menos que el top one anterior (2.782)”. Esta simple resta -que inicialmente altera la lógica de comparación acostumbrada- representa el avance genético de todas las razas lecheras que existen en Estados Unidos, en base a la enorme información que llevan las diversas asociaciones en sus registros. Y esto mismo sucede con todas las demás características productivas que están incluidas en la fórmula del TPI. “También están incluidas las características de tipo, porque también el tipo va mejorando, y esto se refleja en el denominado tren genético”, señala Juan Vásquez. Lo interesante -agrega- es que el TPI interpreta lo que el productor lechero va buscando, y eso explica por qué se han ido agregando nuevas características a su fórmula. 6 4 d l e c h e . 2 0 1 5 Fórmula TPI Diciembre 2014 QUÉ HAY DE NUEVO Este año el TPI agrega dos nuevos índices, el primero de los cuales se denomina Fertility Index (FI). Desde hace bastante tiempo, el tema de la fertilidad viene siendo una inquietud prioritaria en todas las lecherías del mundo, y la Asociación Holstein ha “recogido el guante” incorporando esa información en el TPI, buscando favorecer la selección de toros cuyas hijas presenten mejores niveles en este ítem. Juan Vásquez apunta que el FI considera facilidad de concepción, en vaquillas; mientras que en vacas contempla facilidad para empezar a ciclar, demostración del celo, mantención de la preñez, entre otras. La otra inquietud que el TPI recoge este año es la nutrición (Feed Efficience, FE). La Holstein ha dejado de valorar las enormes vacas de antaño, que era el ideal de un criador. Hoy se busca eficiencia económica, razón por la cual se valora la vaca que convierte mejor los alimentos en kilos de leche. “Existe una correlación de requerimiento nutricional por litros de leche producidos”, explica Vásquez. Es decir, en la medida que un productor produce más, tiene un mayor requerimiento nutricional para producir esos litros, y la única manera de bajar sus requerimientos es disminuir su requerimiento de mantención. “Resulta fácil comprender que un animal de un tamaño moderado, en relación a una vaca gigante, tiene un menor requerimiento de mantención”, dice Vásquez. “Si la vaca moderada produce igual o más leche que la vaca gigante, lo hará de manera más eficiente, y esto es precisamente lo que viene a recoger este indicador, que ha sido incorporado al TPI para tender la selección de toros que generen vacas con mejor eficiencia de conversión”.
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