RECURSOS ESCUELA SABÁTICA Bosquejo para el Repaso de la Lección de Escuela Sabática IV Trimestre de 2014 La epístola de Santiago Lección 3 18 de octubre de 2014 Soportar la tentación Dr. J. Joaquín Cazares Carreón VERDAD CENTRAL: Nuestro Señor es más poderoso que nuestras tentaciones, solo en Él, y por su Palabra, podemos tener la victoria. La necesidad en la vida de mis alumnos es: Comprender que nadie es tan malvado que no tenga esperanza. Objetivos especiales: a. Cognoscitivo: Entender que Dios es mayor que nuestra inclinación al mal. b. Afectivo: Sentir el poder de la Palabra de Dios dándonos fuerza y valor para vencer la tentación. c. Psicomotriz: Elegir aplicar la palabra de Dios a nuestra vida personal. Ilustración: Una imagen donde una persona tenga a su lado a un ángel del bien y a otro ángel del mal. Escudriñar las Escrituras: Santiago 1:12. Aplicación: ¡Muchas gracias, Señor, por enseñarme que eres real y que con tu ayuda venceré las tentaciones! BOSQUEJO I. INTRODUCCION A. ¿Qué cristiano no se ha preguntado acerca de su salvación y más después de haber caído en pecado? ¿Cuándo te sentiste fuerte y cuando te sentiste débil? Seamos realistas, ¿Cuánto tiempo pasamos estudiando la Biblia y platicando con Dios y cuánto tiempo dedicamos a ver televisión o navegando en Internet? B. ¿De qué tres etapas de la tentación nos habla la lección de esta semana? C. Hoy analizaremos tres etapas de la tentación: a. El origen de la tentación; b. El fruto de la tentación; c. La solución de la tentación. . II. SOPORTAR LA TENTACIÓN 1. El origen de la tentación A. Dios no es autor ni la fuente de la tentación (Santiago 1: 13 y 14). Recursos Escuela Sabática © a. La batalla del pecado comienza en la mente. • La pura verdad es: que nosotros decidimos pecar. b. Nadie puede forzarnos a pecar Romanos 6:16-18. c. Los deseos, las inclinaciones y las propensiones pecaminosas capturan nuestra atención constantemente (Santiago 1:14). d. Nuestros propios deseos nos atraen y nos seducen, y cuando cedemos a ellos finalmente nos enganchan y atrapan. B. La tentación no es pecado. a. Aun Jesús fue tentado. b. El problema no es la tentación misma, sino como respondemos a ella. c. Tener la naturaleza pecaminosa no es, en sí mismo y por sí mismo, pecado. • Pero, permitir que nuestra naturaleza pecaminosa controle nuestros pensamientos y dicte nuestras elecciones, si lo es. d. Ilustración del capellán Barry Black: Su mamá les daba una moneda por cada versículo que se aprendieran de la Biblia. Cuando tenía 13 años memorizó Proverbios 1:10. Cuando regresaba de la escuela dos de sus compañeros le dijeron que les ayudara a “devolvérsela a alguien que se había burlado de ellos”. Pero el texto de Proverbios 1:10 le hablaba a su mente y dijo NO. Sus “amigos” fueron a “devolver” a ese muchacho y lo asesinaron. Después el que lo invitaba le dijo: “Yo no lo hice, fue el otro que lo hizo”. Pero eso no hizo la diferencia en la decisión de la corte, los dos les dieron la pena de prisión perpetua. Dice Barry, esto significa que si yo hubiere ido con ellos, aun si hubiese estado allí repitiendo ese versículo, también hubiere recibido la misma sentencia. Actualmente Barry Black es el capellán Adventista del Senado. 2. El fruto de la tentación A. El pecado y la muerte es el fruto de la tentación (Santiago 1:13-15). a. Cuando se nutre un deseo equivocado, el pecado “es concebido”, como un bebe (Santiago 1:15). • Y cuando el pecado crece, da a luz la muerte. b. Esto es paradójico. El proceso que debe dar vida resulta en muerte (Romanos 7:10-13). • El pecado es como el cáncer hace metástasis y sea dueña del cuerpo hasta destruirlo. c. Todos hemos sido contagiados por la enfermedad más contagiosa del mundo: El pecado. d. Nuestros corazones son malos desde nuestro nacimiento, y lo más triste es, que ni tú ni yo lo podemos cambiar. B. Tentación, pecado y muerte (Santiago 1:14 y Romanos 7:15, 17-19). a. Santiago, al igual que Pablo, nos dice que la naturaleza humana tiende hacer más atractiva y reacciona siguiendo sus propios deseos e impulsos, en vez de los principios cristianos. b. “Lo que hago, no lo entiendo, pues no hago lo que quiero, sino lo que detesto, eso hago…De manera que ya no soy yo quien hace aquello, sino el pecado que está en mí…sino el mal que no quiero, eso hago” Romanos 7:15,17-19. • Dos fuerzas que tiran de la persona en sentidos opuestos. c. Por lo tanto, al estar relacionados con la impaciencia y la ira, el impulso hacia el mal del cual hemos hablado. Recursos Escuela Sabática © • Fácilmente caemos. d. De esto viene hablando Santiago porque su comunidad de cristianos se habían dejado llevar como Eva se dejó engañar (Génesis 3:1-6). • Desde el mismo inicio podemos ver los pasos que se dan o que nos conducen al pecado. • Todo comienza al desconfiar de Dios. • Satanás sigue usando el mismo método que uso al engañar a los santos ángeles (Apocalipsis12:4, 7-9). e. El pecado siempre comienza en la mente, luego, en la imaginación y los sentimientos se hacen cargo, y pronto caemos en pecado. • A menudo nos preguntamos como sucedió, la respuesta es fácil: nosotros dejamos que suceda. • Nadie nos forzó a pecar, muchas veces son nuestras necesidades. 3. La solución a la tentación A. ¡Hay buenas noticias! a. La solución a esto solo puede venir de Dios. • “En el ejercicio de su voluntad. Él nos hizo nacer por la palabra de verdad”. (Santiago 1:18). • En otra versión dice “Además quiso que fuésemos sus hijos. Por eso, por medio de la buena noticia de salvación nos dio una vida nueva”. Santiago 1:18 TLA. b. Así, mientras que en el verso 15 se describe al pecado. “Dando a luz la muerte”, en el verso 18, se afirma que Dios ha decidido no solo mejorar nuestra vida espiritual, sino “engendrar” en nosotros una nueva vida, y esto por medio de la “palabra de verdad”. • Expresión usada por Pablo (Efesios 1:13; Colosenses 1:5; 2 Timoteo 2:15). • Jesús, Pablo y Santiago: conectan salvación con el nuevo nacimiento. c. Pero nacer de nuevo, no es lo único que Santiago pretende enfatizar en este versículo 18. • El desea subrayar el propósito de tan extraordinario milagro. “para que seamos primicias de sus criaturas”. • La versión NVI dice: Para que fuéramos como los primeros y mejores frutos de su creación”. d. O sea, que nacer de nuevo nos hace una especie de primicias, este es un concepto que se asocia con la santidad y como la pertenencia a Dios (Éxodo 23:16; 34:22; Levítico 19:23-25; Jeremías 2:3; Romanos. 11:16; Apocalipsis 14:4). e. ¡Qué maravilloso honor nos concede el Señor de consideramos sus primicias! • Pero también una gran responsabilidad, pues tenemos que manifestar su santidad en nuestras vidas. f. Por eso Santiago 1:19 nos describe lo que tenemos que hacer. • Implantar la palabra de Dios en nuestra mente. Santiago 1:18-20. • La palabra de Dios tiene poder para transfórmanos, si la dejamos que obre en nosotros. g. Pero también nuestras palabras tienen poder para dar alivio o dañar, alegrar o enojar, etc. • ¿Recuerdas la última vez que alguien te desbastó con sus palabras? • La profundidad de las emociones que sentiste debería mostrarte cuan poderosas pueden ser las palabras, para el bien o para el mal. Recursos Escuela Sabática © h. Por esto es necesario escuchar más a Dios y permitirle que abra en nosotros el entendimiento. • La solución que nos da Santiago 1:21 esta resumida en este texto la fe y la salvación. • ¿Cómo puedes aplicar este pasaje de Santiago 1:21 en tu vida? B. La apelación a poner a un lado toda impureza y separamos de la maldad. a. En la palabra de Dios tenemos las promesas que nos ofrecen la seguridad de la victoria si las reclamamos y nos aferramos a ellas con fe, tendremos la victoria. Efesios 6:12-17, Lucas 4:8 y Salmos 119:11. b. “El plan de redención contempla nuestro completo rescate del poder de Satanás. Cristo separa siempre del pecado al alma contrita. Vino para destruir las obras del diablo, y ha hecho provisión para que el Espíritu Santo sea impartido a toda alma arrepentida, para guardarla de pecar” (El Deseado de todas las gentes, p. 277). c. “Si habéis aceptado a Cristo como vuestro Salvador personal, habéis de olvidar vuestro yo, y tratar de ayudar a otros” (Palabras de vida del gran Maestro, p. 47). d. Recordemos que nadie es tan malvado que no tenga esperanza. e. Dios es mayor que nuestra inclinación al mal, y por medio de Él y su Palabra implantada podemos tener la victoria ¡Amen! III. Conclusión A. Hemos estudiado tres etapas de la tentación: a. El origen de la tentación; b. El fruto de la tentación; c. La solución de la tentación. Dios provee todo lo que necesitamos para apartarnos de la esclavitud del pecado. La herramienta más poderosa es lo “espada del Espíritu” que es su Palaba. Nos insta a mantener esa espada bien afilada y lista, al guardar su Palabra en nuestros corazones a fin de que no pequemos contra él (Salmo 119:11b) B. ¿Deseas con la ayuda del Espíritu Santo estudiar, guardar su Palabra en tu mente y corazón para no caer en tentación? C. Oración Dr. J. Joaquín Cazares Carreón www.cazaresfoundation.org Compilación: Rolando D. Chuquimia RECURSOS ESCUELA SABÁTICA © Recursos Escuela Sabática ©
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