MTRA. ROCÍO RAMÍREZ RODRÍGUEZ CULTIVO DE MICROALGAS PROGRAMA DE INVESTIGACIÓN DE ENERGÍA Y BIOMASA La Universidad Iberoamericana de Puebla (UIAP) cuenta con el laboratorio de “Biomasa Microalgal y Vegetal” éste espacio cuenta con la infraestructura para el mantenimiento de las cepas y el cultivo en pequeña escala. Programa de Investigación en Energía y Biomasa CULTIVO DE MICROALGAS Rocío Ramírez Rodríguez1 & Mónica C. Rodríguez-Palacio2 1 Laboratorio de microalgas y biomasa vegetal. Instituto de Investigaciones Interdisciplinarias en Medio Ambiente “Xabier Gorostiaga”, Universidad Iberoamericana- Puebla. 2 Laboratorio de Ficología Aplicada. Universidad Autónoma Metropolitana, unidad Iztapalapa. El cambio climático es uno de los grandes desafíos del siglo XXI, ya que sus impactos son globales y cada vez más severos afectando la estabilidad económica, social y ambiental del planeta (Loera-Quezada & Olguín, 2010). Por tal motivo, es necesario impulsar una investigación más interdisciplinaria y participativa donde se pueda vincular diversos objetivos: social, ambiental y el científico-tecnológico. Lo cual permitirá una mejor comprensión de los fenómenos ambientales y sobre todo el aprovechamiento sustentable de los recursos naturales. Ante el nuevo escenario, se ha impulsado la búsqueda de nuevas fuentes de proteína y de energía, y una de ellas es la biomasa proveniente del cultivo de algas. Las algas constituyen un grupo muy diverso de organismos fotosintéticos que han colonizado una amplia gama de ecosistemas acuáticos y terrestres gracias a su alta plasticidad y diversidad metabólica (cita). Al igual que las plantas terrestres, las algas emplean la fotosíntesis para convertir la energía solar en energía química y la almacenan en forma de aceite, hidratos de carbono y proteínas (Demirbas & Dermirbas, 2010). Sin embargo, las algas presentan elevadas eficiencias fotosintética (4 – 8 %), a diferencia de las plantas que únicamente obtienen el 2%. Así mismo, las estimaciones de productividad es elevada ya que se han reportado de 60 – 80 toneladas de peso seco/ha/año; en contraste con cultivos convencionales de plantas superiores que producen del orden de 10 – 30 ton/año (Kojima & Lee, 2001). Por tal motivo, el cultivo de microalgas tiene numerosas ventajas ya que no compiten por los terrenos cultivables con las plantas terrestres; pueden crecer en agua de mar o aguas residuales, preservando las valiosas fuentes de agua dulce; además, por sus elevadas tasas de 1 Programa de Investigación en Energía y Biomasa crecimiento consumen más dióxido, lo cual ayuda a combatir el cambio climático global (Dermibas & Dermibas, 2010). Desde hace miles de años las algas han sido empleadas como alimento humano en Oriente, y sólo en el último siglo se ha intensificado investigaciones enfocadas en la diversificación del uso de la biomasa algal, tales como: Ficocoloides: agar (agarosas), carragenatos, alginatos, ulvanos Alimento animal Biofertilizantes Biorremediación Metabolitos secundarios (biomedicina) Ácidos grasos esenciales (PUFAs de cadena larga) Exopolisacáridos Antioxidantes Pigmentos Moléculas simples de elevado contenido energético: amoniaco, metano, hidrógeno y alcoholes El inicio de la producción de microalgas comenzó hace unos 30 años, con unas 500 toneladas a escala mundial. Actualmente, la producción mundial es de aproximadamente 10,000 toneladas anuales, las algas más cultivadas son: Haematococcus, Dunaliella, Chlorella, Arthrospira, Isochrysis y Botryococcus; principalmente para obtención de proteínas, astaxantinas, β-caroteno, glicerol, lípidos y materia prima para la elaboración de biocombustibles (Vanthoor-Koopmans et al., 2014; Raja et al., 2007; Fig. 1). Aunque el grupo de las algas es muy diverso y cuenta con aproximadamente 100,000 especies (Van den Hoeck et al., 1995), únicamente se han reportado 493 especies como posibles alternativas de alimentación para el hombre y otros animales, el resto está aún por valorar (Medina et al., 2012). Así que para tener un mejor aprovechamiento de este recurso es necesario la obtención de nuevas y mejores especies de algas. 2 Programa de Investigación en Energía y Biomasa Figura 1. Complementos alimenticios a partir de Arthrospira máxima (espirulina). Mundialmente existen bancos de algas dedicados al aislamiento, identificación, caracterización, conservación y suministro de algas. Entre los ceparios más importantes, se reporta a Estados Unidos la colección de la Universidad de Texas (Starr, 2010) y el centro Provasoli-Guillard National Center for Culture of Marine Phytoplankton (CCMP). Australia cuenta con la Colección Nacional de Cultivos de Algas (ANACC-CSIRO); en Portugal la Algoteca de la Universidad de Coimbra (Santos, 2008); Francia cuenta con el cepario de cianobacterias del Instituto Pasteur (Morales –Avedaño et al., 2013) y en España el Banco Español de Algas (BEA). Latinoamérica cuenta con la colección de la Universidad Nacional de la Patagonia “San Juan Bosco” en Argentina (Albarracín, et al 2009); Chile con la Colección de microalgas de la Universidad de Concepción (González et al., 2008); en Ecuador con la colección del laboratorio de Ficología de la Pontificia Universidad Católica del Ecuador (PUCE; Morales - Avedaño et al., 2013). En México sobresalen dos colecciones: la del Centro de Investigaciones Biológicas del Noroeste CIBNOR, enfocada principalmente en especies tóxicas y nocivas y la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM-I), donde se cuenta con especies de algas aisladas de diferentes ambientes y lugares de la República Mexicana. 3 Programa de Investigación en Energía y Biomasa Aunque las cepas para fines comerciales se obtienen de bancos ya establecidas, es de suma importancia contar con una colección de especies locales ya que es un reservorio de la diversidad autóctona y además están más adaptadas a las condiciones ambientales dominantes y por lo tanto la eficiencia de los cultivos será mayor (Band; 2007). Hoy en día el cultivo de microalgas ha recibido gran interés por parte de universidades, centros de investigación e industrias. Sin embargo, gran parte de estas actividades son aisladas y a veces sin repercusión en la sociedad ni en beneficio de la naturaleza. Por consiguiente, es necesario promover una investigación más humanista, más social donde las comunidades más vulnerables ante el cambio climático encuentren una alternativa para beneficiarse económicamente con la transferencia de tecnología, o así como mejorar su dieta mediante el consumo de proteína proveniente de la biomasa algal. Todo esto sin olvidar la una producción más limpia y sostenible. Para potenciar el cultivo de algas es necesario la obtención de mejores especies de algas, la mejora de las tecnologías de cultivo, aumento de producción, reducir costos de producción, optimizar la obtención de cosecha y el procesos de secado. La Universidad Iberoamericana de Puebla (UIAP) cuenta con el laboratorio de “Biomasa Microalgal y Vegetal” éste espacio cuenta con la infraestructura para el mantenimiento de las cepas y el cultivo en pequeña escala: bioreactores de 14 L y fotobioreactores verticales de acrílico de 28 L. Además, la UIAP tiene una de las primeras plantas piloto demostrativas de investigación de Microalgas en México y Latinoamérica. La cual consiste de cuatro fotobioreactores verticales de 70 L (construcción casera), tres tanques tipo raceway de 300 L y cuatro de 3,000 L. En la actualidad, el laboratorio mantiene cultivos semicontinuos de cuatro cepas de algas: Arthrospira máxima (espirulina), Neochloris oleoabundans, Dunaliella salina y Verrucosum sp. las cuales se han escalado en reactores de 14 L, fotobioreactores verticales 28 y 70 L y tanques raceway de 300 y 3,000 L (Fig 2). De manera cotidiana estas cepas se aíslan para mantener los cultivos puros y así mismo se aíslan algas provenientes de lagos cercanos con el fin de contar con un reservorio de algas locales para posteriormente estudiarlas, escalarlas y reconocer sus metabolitos. 4 Programa de Investigación en Energía y Biomasa El laboratorio cuenta con dos proyectos internos apoyados por la UIAP: a) Investigación de microalgas para el desarrollo de complementos alimenticios, obtención de materia prima para la elaboración de biocombustibles y b) Lactosuero como medio de cultivo para el crecimiento de Arthrospira máxima. En los cuales se trabaja de manera conjunta con el Departamento de Ingenierías, el Instituto de Diseño e Innovación Tecnológica (IDIT) y el laboratorio de Ficología de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM-I). Así mismo, el laboratorio brinda apoyo y asesoría a los alumnos de la UIAP para desarrollar sus proyectos de Área de Síntesis y Evaluación (ASE), servicio becario y prácticas profesionales. Este espacio cuenta con el apoyo del laboratorio de Ficología Aplicada UAM-I, el cual brinda asesoría técnica y la aportación de cepas para la UIAP. El laboratorio de Ficología contiene una colección de 60 cepas dulceacuícolas, 38 marinas, 15 de aguas residuales y 10 de ambientes salinos (Fig. 2). Así mismo tiene espacio para establecer biorreactores de 14 litros y así mismo ha desarrollado y aplicado la metodología para el análisis de calidad de la biomasa algal. Figura 2: a) Banco de microalgas del laboratorio de Ficologia Aplicada, UAM-I; b) bioreactor de 14 L; c) Tanques tipo raceway de 300 L; d) raceway de 3,000 L y e) fotobioreactores verticales (caseros) de 60 L y f) planta piloto de cultivo de microalgas en la UIAP. 5 Programa de Investigación en Energía y Biomasa Bibliografía Albarracín, I., Cravero, M., Salomón, R., Pío, G., Otaño, S., Morizon, S., Parra, A & Prósperi, C. 2009. Desarrollo del laboratorio de microalgas en Patagonia Argentina. Facultad de Ciencias Naturales. UNPSJB Trelew-Chubut. Argentina. Arredondo, B. 1997. Colección de Microalgas. Centro de investigaciones Biológicas del Noreste, S. C (CIBNOR) 22-23. CONACyT. México D.F. México. Band, C. 2007. Aislamiento, purificación y mantenimiento de cepas de microalgas. En: Métodos y herramientas analíticas en la evaluación de la biomasa microalgal. Arredondo, B & Voltolina, D (Ed.). Centro de investigaciones biológicas del Noroeste, S.C. La Paz. 97 pp. González, M., Cifuentes, A., Inostroza, I & Gómez, P. 2008. Colección de microalgas. Departamento de Botánica, Facultad de Ciencias Naturales y Oceanográficas, Universidad de Concepción, Concepción, Chile. Loera-Quezada, M & Olguín, E. 2010. Las microalgas oleaginosas como fuente de biodiesel: retos y oportunidades. Rev Latinoam Biotecnol Amb algal 1: 91-116. Medina, A., Piña, P., Nieves, M., Arzola, J & Guerrero, M. 2012. La importancia de las microalgas. CONABIO. Biodiversitas, 103: 1-5. Morales-Avedaño, E., Luna, V., Navarro, L., Santana, V., Gordillo, A & Arévalo, A. 2013. Diversidad de microalgas y cianobacterias en muestras provenientes de diferentes provincias del Ecuador, destinadas a una colección de cultivos. Revista Ecuatoriana de Medicina y Ciencias Biológicas 1 y 2: 129-150. Santos, L. 2008. Algoteca de la Facultad de Ciencias y Tecnología de la Universidad de Coimbria (FCTUC). Portugal. Star, R. 2010. The culture Collection of Algae at the Univeristy of Texas at Austin (UTEX). Hoeck, C. van den; Mann, D & Jahns, H. 1995. Algae. An Introduction to Phycology. Cambridge University Press. New York. 623 pp. Vanthoor-Koopmans, M., Córdova, Matson, M., Arredondo-Vega, B., Lozano-Ramírez, C., García-Trejo, J & Rodríguez-Palacio, M. 2014. Microalgae and Cyanobacteria production for feed and foof supplements. Págs: 253 – 275 En: Biosystems engineering: biofactories for food production in the century XXI. Guevara-González, R & Torres-Pacheco, I (Ed.). Springer International Publishing Switzerland. 6 2015 PLAN DE PROYECTOS PROGRAMA DE INVESTIGACIÓN DE ENERGÍA Y BIOMASA Programa de Investigación de Energía y Biomasa PROYECTOS 2015 PROGRAMA DE INVESTIGACIÓN DE ENERGÍA Y BIOMASA I. DATOS INFORMATIVOS 1.1. Institución: Universidad Iberoamericana Puebla 1.2. Nivel: Investigación, Docencia (Licenciatura y Posgrado) y Vinculación 1.3. Responsable: M. en C. Rocío Ramírez Rodríguez II. JUSTIFICACIÓN Ante el nuevo escenario de cambio climático, se ha impulsado la búsqueda de nuevas fuentes de proteína y de energía, y una de ellas es la biomasa proveniente del cultivo de algas. Las algas constituyen un grupo muy diverso de organismos fotosintéticos que han colonizado una amplia gama de ecosistemas acuáticos y terrestres gracias a su alta plasticidad y diversidad metabólica (González, 1987). Al igual que las plantas terrestres, las algas emplean la fotosíntesis para convertir la energía solar en energía química y la almacenan en forma de aceite, hidratos de carbono y proteínas (Demirbas & Dermirbas, 2010). Sin embargo, las algas presentan elevadas eficiencias fotosintética (4 – 8 %), a diferencia de las plantas que únicamente obtienen el 2%. Así mismo, las estimaciones de productividad es elevada ya que se han reportado de 60 – 80 toneladas de peso seco/ha/año; en contraste con cultivos convencionales de plantas superiores que producen del orden de 10 – 30 ton/año (Kojima & Lee, 2001). El inicio de la industria del cultivo de algas comenzó hace unos 30 años, con unas 500 toneladas a escala mundial. Actualmente, la producción mundial es de aproximadamente 10,000 toneladas anuales, las algas más cultivadas son: Haematococcus, Dunaliella, Chlorella, Arthrospira, Isochrysis y Botryococcus; principalmente para obtención de proteínas, astaxantinas, β-caroteno, glicerol, lípidos y materia prima para la elaboración de biocombustibles (Vanthoor-Koopmans et al., 2014; Raja et al., 2007) En los últimos años se han logrado investigaciones importantes en la diversificación del uso de la biomasa algal, para la obtención de: • Ficocoloides: agar (agarosas), carragenatos, alginatos, ulvanos • Alimento animal 1 Programa de Investigación de Energía y Biomasa • Biofertilizantes • Biorremediación • Metabolitos secundarios (biomedicina) • Ácidos grasos esenciales (PUFAs de cadena larga) • Exopolisacáridos • Antioxidantes • Pigmentos • Moléculas simples de elevado contenido energético: amoniaco, metano, hidrógeno y alcoholes Por lo tanto la biomasa algal es una fuente de energía renovable, clave en la diversificación energética y disminución de la dependencia energética externa, así como el ahorro energético de las emisiones de gases de efecto invernadero. Los aspectos decisivos en el desarrollo de esta fuente de energía dependen de la mejora en la tecnología, eficiencia energética, reducción de costos de producción, desarrollo e implantación de criterios de sostenibilidad. Actualmente el cultivo de microalgas es un sector con gran potencial y ha recibido ha recibido gran interés por parte de universidades, centros de investigación e industrias. Se estima que hay de 30,000 a 100, 000 especies de microalgas que incluyen tanto representantes eucarióticos como procarióticos. Hasta el momento se han reportado 493 especies de algas que podrían ser empleadas en la alimentación del hombre y animales, la obtención de biodiesel, bioetanol. En países como Chile, Alemania, India, Japón, España, Estados Unidos (Hawai) están en la vanguardia en el cultivo de microalgas. Un ejemplo a mencionar es el Banco Español de Algas (BEA), en el cual se aísla, identifica, caracteriza, conserva y suministra de microalgas y cianobacterias. Además se encarga en el desarrollo del nuevo sector bioindustrial basado en el cultivo y aplicaciones de las microalgas y cianobacterias. III. OBJETIVOS 3.1. Objetivo General Impulsar la investigación para la búsqueda de alternativas energéticas y alimenticias, además de promover la economía a través de la transferencia de tecnologías. 2 Programa de Investigación de Energía y Biomasa 3.2. Objetivos Específicos a) Fomentar la investigación y desarrollo mediante la colaboración conjunta de científicos de diferentes áreas (ingeniería, ciencias ambientales y nutrición), así como las empresas involucradas en el sector. b) Obtención de mejores especies de algas para la bioindustria. Para lo cual se pretende el muestreo en cuerpos de agua del estado de Puebla y zonas aledañas, aislar, identificar y caracterización del potencial para diferentes aplicaciones (alimenticio, medicina, biorremediación, energía alternativa) c) Establecimiento de un cepario de microalgas provenientes de los cuerpos de agua del Estado de Puebla y zonas cercanas. d) Asesoría a los alumnos de la Universidad Iberoamericana para el desarrollo de servicio social, prácticas profesionales y ASE. e) Difusión de actividades, eventos demostrativos de la planta piloto. f) Formación y capacitación de recursos humanos mediante cursos, seminarios, reuniones científicas, dirección de becarios y formación de posgrado. IV. ACTIVIDADES 4.1. Investigación - Desarrollo de Proyectos de investigación - Servicios internos y externos - Incorporación de estudiantes de licenciatura (becarios, prácticas profesionales, servicios sociales, estancias.) - Estudiantes de Posgrado (Asesoría y dirección de tesis, estancias) 4.2. Metas de Infraestructura - Mantenimiento y funcionamiento del Invernadero de Microalgas - Construcción del secador solar - Construcción y funcionamiento de fotobioreactores verticales de 28L en condiciones de laboratorio Transferencia de tecnología de cultivo de espirulina en una microgranja - Equipo de cosecha de biomasa - Equipo para el análisis de calidad de biomasa 3 Programa de Investigación de Energía y Biomasa V. PROGRAMACIÓN DE ACTIVIDADES Nº 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 11 12 13 14 15 16 17 18 PROYECTOS/ACTIVIDADES 2015 E F M A M J J A S O N D Mantenimiento de las cepas de: Artrhospira máxima, Neochloris oleobundans, Verrucosum sp. Escalamiento de las cepas Artrhospira máxima, Neochloris oleobundans, Verrucosum sp. en el laboratorio Aislamiento de cepas de microalgas de los cuerpos de agua del estado de Puebla Mantenimiento y limpieza del invernadero de Microalgas Escalamiento de los cultivos en el invernadero de microalgas Cosecha de la biomasa en condiciones de invernadero Análisis bromatológico de la biomasa (lípidos, carbohidratos, pigmentos, aceites) Pruebas para la cuantificación de aceites en el HPLC y cromatografía de gases en la biomasa Cultivo de espirulina en lactosuero Capacitación cromatografía de gases Extracción de aceite en el cromatógrafo de gases Análisis de resultados y redacción del trabajo para el congreso SOLABIA “obtención de lípidos a partir de la microalga Chollestrella” Participación al IV congreso Latinoamericano de Biotecnología SOLABIA, Florianópolis, Brasil. Redacción del artículo “Bioindicadores de la calidad de agua en ríos de Valle de Bravo, Amanalco, Edo Mex. Asesoría a alumnos de ASE Promoción de la carrera de ciencias Ambientales Obtención del título de la especialidad de biotecnología en la UAM- I Superación académica: capacitación para el uso del cromatógrafo de gases 4
© Copyright 2024 ExpyDoc